Capitulo 4

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Como dije anteriormente en la otra historia, yo no soy la verdadera creadora solo soy una amiga de ella que se ara cargo de la cuenta mientras ella regresa así que comencemos.

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El tiempo avía pasado muy lento para la familia Madrigal que cada vez estaban más preocupados por el Omega, las esperanzas de que pudiera despierta estaba asta los suelos asta ese día.

Mirabel: Hola Mariano que te trae por aquí

Mariano: Me gustaría poder ver a tú tío

Mirabel: Estás seguro

Mariano: Si

Mirabel: Bien, sígueme

Mirabel y Mariano se dirigieron a la habitación en dónde se encontraba Bruno.

Mirabel: Vendré en 10 minutos

Mariano: Ok

Después de que Mirabel se fuera Mariano se hacerca a la cama en dónde se encontraba Bruno, al llegar acarició el cabello del Omega tarareando una canción que su madre le cantaba cuando era chiquito.

Mariano: Necesito que despiertes, no puedo vivir un día más sin ti, no podré soportar vivir un día más sin poder ver ese brillo de tus ojos, esa hermosa sonrisa que te caracteriza, te necesito aunque tú me odies, siempre te amare

Las lágrimas bajaban sin parar por las mejillas de aquel hombre, sin darse cuenta que sierto Omega empezaba a abrir sus ojos.

Narra Bruno:

Tenía un dolor muy fuerte en mi cabeza, al igual que en mi cuello, mis ojos pesaban demaciado como para poder abrirlos pero hice esfuerzo y lo primero que ví fue a Mariano llorando en la orilla de mi cama, no sabía porque estaba así pero me daba un poco de lastima.

Tenía planeado decirle algunas palabras pero de tan solo abrir la boca un intenso dolor amenazaba mi cuello, ardía demaciado que algunas pequeñas lágrimas salieron de mis ojos, cuando volte haber a Mariano me encontré con su mirada toda sorprendida como si de un fantasma hubiese visto.

Narra Mariano:

No podría creer lo, el en verdad estaba despierto frente a mi, no lo dude dos veces y me a balance así el rodiandolo con mis brazos en un fuerte abrazo.

Mariano: Al fin despiertas

Bruno no decía ni una palabra algo que preocupo a Mariano.

Mariano: Porque no me dices algo

Bruno quería hablarle pero el ardor en su garganta no le permitía.

Mariano: No quieres hablar con migo verdad, estás molesto

Bruno negaba con la cabeza en señal de lo que dijo Mariano no es correcto pero este no lo e ponía atención por estarse maldiciendo.

Mente de Bruno:

No puedo creer que sea tan pendejo, que es lo que puedo hacer para que me haga caso, ah ya se

Bruno se hacerca más a Mariano y le hagara una mejilla delicadamente haciendo sonrojar al contrario, al estar un poco más cerca Bruno le da una cachetada al Gusman.

Mariano: Aunch porque fue eso

Bruno: Pues para que me hicieras caso *lo dice en su mente*

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Bueno aquí les dejo la continuación de esta historia

UN MATRIMONIO ARREGLADO (Bruno x Mariano) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora