Soy el guerrero que lucha contra la marea, el único que nada contracorriente, superando cada ola con mis brazos, sin importar lo cansado que me encuentre, sin importar la fuerza de mi enemigo.
Es este océano, este océano que me rodea, me sobrepasa sobre todas mis cualidades y me cubre sin dejarme respirar un solo segundo, incapaz de ver el horizonte hacia alguna esperanza cercana, este maldito océano que yo mismo creé, creyendo que podría vivir sin tocar el agua alguna vez, ahora lucho para evitar ahogarme, sabiendo que en algún punto mi pataleo constante solo servirá para terminar de hundirme, sintiéndome de alguna forma responsable de este ahogamiento, cada vez las bocanadas de aire me proveen menos oxígeno, mientras mis brazos necesitan más fuerza de voluntad para hacer brazadas más cortas.
Y sin embargo sigo, tratando de nadar para llegar a mi tierra firme, donde por fin podré descansar agradecido de haber estado vivo para presenciarlo, ya soy capaz de ver la orilla aun encontrándome lejos de esta, doy todo lo que me queda, sin energía ya me veo sabiendo que un solo descanso sería el último, no sé exactamente la distancia, solo sé que a cada segundo me cuesta más llegar y al mismo tiempo estoy más cerca.
Todavía no estoy seguro de siquiera donde me encuentro, pero estoy determinado a llegar lo más lejos que estos brazos me permitan, porque sé que en cada océano hay un final si uno nada lo suficiente, solo uno tiene que estar dispuesto a hacerlo, y después de todo soy el guerrero contra la marea por algo.
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Palabras ahogadas en el océano de mi mente
SonstigesAquí está todo lo que me sobra, los pensamientos que siento que podrían ser interesantes si los exteriorizo, espero ser capaz de ser original o interesante algún día, busco sonar profundo, aunque suelo acabar sonando elitista y prepotente.