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Marco se fue corriendo del laboratorio, deseando que nada malo le pasará a Dipper.

Tomo lo que pudo, e intento idear un plan rápido para llegar a Ford.

Miro la ventana, notando que era casi imposible moverse sin ser atrapado por algún monstruo. No veía ninguna casa o refugio, así que no tenía idea de a dónde ir.

Recordó el collar que él y Star compartían, el cual tenía rastreador.

Busco su celular y empezó a buscar la ubicación del collar.

Vamos señal, no me falles justo ahora. -

El celular finalmente cargo, mostrando que la ubicación era bastante cerca de la cabaña. Al lado contrario de esta, unos metros.

Salió con armas y protecciones, siguiendo la ubicación.

Aparecieron ojos voladores, por lo cual le disparó a todos. Empezó a correr, atacando a todos los monstruos que se le acercaban.

Llegó a una gran puerta. Literalmente, solo una puerta en medio del bosque. Sería muy peligroso entrar así como así.

Tomo al primer monstruo semi inconsciente que antes vigilaba la puerta, y apuntándole con su arma, lo obligó a abrir la puerta.

Entró rápidamente, siguiendo las indicaciones del rastreador.

No se encontró con más monstruos, por lo que le quedaba solo una puerta. Supuestamente, del otro lado estaba Star. O al menos su collar.

Preparó su arma, y abrió rápidamente la puerta. Todos quedaron en shock.

Marco se quedó atónito viendo la escena. Ford flotando con cadenas azules, casi inconsciente. Star contra un tubo, ya inconsciente y sin mucho cabello. Mabel igual, solo que en una ruleta. Wendy, Soos, Robbie, Pacífica y sobre todo Gideon estaban llenos de moretones, y suciedad. Stan estaba gritándole a Tom, y gracias que no veía, preguntaba qué pasaba. Tom aumento su sonrisa al verlo.

Le disparó rápidamente, inmovilizandolo contra una pared. Cerró la puerta tras él, esperando que no llegarán más monstruos.

Liberó a Stan, pues no sabía cómo liberar a Ford. Hizo lo mismo con Mabel, quien empezó a tratar de despertar al resto.

¿Como lo liberamos? -dijo Marco con desesperación, sabía que ese lazo que inmovilizó a Tom no duraría mucho.

¡Me vas a pagar por esto, Marco! -dijo ardiendo del enojo.

Soltaron las cadenas, soltando a Ford de ellas al fin. Volvió en consciencia, y le quitó las demás armas a Marco.

Tom se libero, y sin perder tiempo despareció de la habitación. Marco cayó inconsciente.

Después de tantos besos, que hacían casi embriagar a Dipper, Bill finalmente lo dejo en paz

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Después de tantos besos, que hacían casi embriagar a Dipper, Bill finalmente lo dejo en paz.

Dipper le siguió los besos, no tenía opción. Luchar era inútil, y si no le correspondía, le pegaba o le lastimaba la boca.

𝐂σ𝐦є𝐁α¢𝐤 - BD/TC.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora