I. Scar

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"Nosotros creamos nuestros propios demonios."

Mark Twain.

Tomas Shelby se encontraba agotado, el camino a casa a caballo se le hizo tan largo a medida que sabía que en su regreso sólo sería recibido por una casa vacía donde sólo tendría soledad y muerte en ella

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Tomas Shelby se encontraba agotado, el camino a casa a caballo se le hizo tan largo a medida que sabía que en su regreso sólo sería recibido por una casa vacía donde sólo tendría soledad y muerte en ella.

Su esposa Lizzie y el pequeño charly lo abandonaron poco después de que se descubriera su Adulterio para detener a Oswald Mosley, el maldito fascista que irrumpió sus planes de reconstruir las empresas Shelby poco después de la caída del banco ese Jueves Negro en Nueva York.

Y pese a que el pequeño Duke le era muy querido, no toleraba la forma en la que Esme buscaba entrar en su vida bajo la manipulación del fantasma de Zelda para con el niño, él le daría su apellido pero aún así le costaba estar serca de él pequeño por culpa de su madre tutelar.

Tenía familia pero estaba solo ya que no podía ser feliz junto a ellos por impedimentos que él mismo se interpuso al caer en el hoyo negro que era su vida desde que falleció Rubí su pequeña y querida niña de no más de diez años e incluso mucho antes cuando perdió a su más grande amor, Grace, la madre de Charly.

El caaballo se detuvo y desperto de sus pensamientos, al levantar la vista a su gran casa, opaca y con cortinas cubriendo todas sus ventanas suspiro deseando al cielo como el gitano que era una segunda oportunidad en ésta vida...

Y algo debió haberlo escuchado porque lo siguiente que sintió fue el sonido de un disparo para caer en profunda oscuridad deseando con aún más ferviente necesidad despertar nuevamente para poder recuper los pequeños rayos de luz que en algún momento habitaron en su vida.

Y algo debió haberlo escuchado porque lo siguiente que sintió fue el sonido de un disparo para caer en profunda oscuridad deseando con aún más ferviente necesidad despertar nuevamente para poder recuper los pequeños rayos de luz que en algún momen...

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Todo estaba oscuro, no tenía nada más a la vista que la nada, sentía frío y miedo....

Miedo por los errores que cometió y el tiempo tan mínimo que tuvo para corregirlos perdiendo todo lo que más amaba.

El hombre fuera de TiempoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora