Amándote

capitulo l

—Me gusta mi compañero de clase—al escuchar eso, Chanyeol escupió su jugo que estaba bebiendo. Solo a este tonto alfa se le ocurre decir eso tan repentino.

—¿Qué? ¿Cuál compañero de clase? ¿Baekhyun?—Sehun asintió en respuesta. Lleva casi todo el semestre tratando de pedirle una cita.

—Pero... ¿Por qué?—. Y no, él no estaba celoso, solo pensaba qué tiene de especial ese omega, que él no tenga

—Es un gran chico, un poco tímido, pero agradable y congeniamos bien. Me gusta mucho—Le dio un último sorbo a su café y le dio una mirada al reloj de la cafetería. "Bueno, tengo que irme. Nos vemos mañana" agarró sus cosas y salió de ahí.

Jamás se había sentido tan triste hasta ese momento. Su alfa gustaba de otro omega. Ahora sí su corazón se había roto en pedazos. Necesitaba irse de ese lugar. Sus lágrimas ya estaban cayendo sobre sus mejillas. Sacó dinero de su cartera y lo dejó sobre la mesa para levantarse e irse, no sin antes mirar el nombre de esa cafetería. Jamás volvería ahí, donde se rompió su corazón.

Iba por las calles frías con el alma destrozada. Jamás pensó que un corazón roto doliera tanto. Ya no juzgaría a esas personas que lloran por un amor no correspondido.

Al llegar a su departamento se quitó su ropa y se acostó en su pequeña cama. Solo quería dormir y jamás despertar...

Se despertó ese día sin muchos ánimos, 

No quería ir a clases, no se sentía bien.
Pero tampoco podía quedarse en su cama sintiéndose miserable.
Luego de pensarlo bien decidió ir, el mundo no se iba detener solo porque a él le doliera el corazón.

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Iba corriendo en los pasillos de la universidad, llegaría tarde a su primera clase.

Al dar la vuelta por el pasillo chocó con algo, más bien con alguien; haciéndolo caer, al levantar su mirada se fijó que se trataba de un alfa. Sintió su aroma; tan fuerte pero a la vez tan cálido.
—Perdón, de verdad lo siento, voy a tarde a mi clase, iba de prisa. Discúlpame—habló rápido, levantó sus cosas y con sus mejillas sonrojadas se puso de pie y siguió corriendo.

El alfa aún asombrado por lo rápido que habló el chico, se puso de pie y se fijó por el pasillo que se fue el menor. –que lindo omega–. Dijo mientras lo seguía con la mirada, luego que se perdió de su visión, se dirigió hacia la dirección.

Su último año no iba a ser tan aburrido como pensó.

Luego de su última clase se encontraba comiendo solo en la cafetería, normalmente Sehun lo acompañaba pero eso ya no va ser así, no después que él esté cortejando a ese omega.

Su estómago dio un respingón solo de pensar que ahora su alfa tiene un omega. Realmente nunca tuvo envidia de nadie, pero como deseaba ser ese chico. No sabe lo afortunado que era por estar con Sehun. Y su lobo aulló dolido.

Acabó su almuerzo y se dirigió a la salida, hoy tenía turno en el restaurante. Su única fuente de trabajo. Su padre no puede ayudarlo y él lo entiende. Jamás tuvo lujos como sus compañeros o amigos pero él estaba agradecido de tener a su padre. Qué con esfuerzo pagó sus estudios hasta la universidad, ya ahí él pudo ayudarle consiguiendo una beca completa. Jamás olvidaría la cara de felicidad de su papá al enterarse que había ganado beca en unas de las mejores universidades y más él siendo omega -y no es que él se menosprecie pero en la sociedad, que un omega hombre estudie alguna carrera universitaria es mal visto, ya que ellos no pueden hacer eso-.

termino su turno y salió rumbo a su departamento, la noche estaba muy fría, y por alguna razón su corazón también se sentía así, si tan solo se hubiese armado de valor y le hubiera confesado sus sentimientos a Sehun, todo esto seria muy diferente, pero ahora ya no puede hacer nada mas que eliminar esos sentimientos y continuar con su vida y estar feliz por su amigo, ya que es su amigo también y tiene que estar su amistad por encima de sus sentimientos.  llego a su edifico y en su piso se fijo que tendría vecinos nuevos. sin darle mucha importancia entro a su lugar.

Iba corriendo por los pasillos, de nuevo iba tarde; esta vez le darían una falta por llegar tarde. Terminando de subir las gradas que lo llevaban a su salón, chocó con una persona, pero esta vez no cayó al suelo, sino en los brazos de la persona con quién chocó. Sintió su aroma y su lobo se emocionó por tal olor.

—Vaya, voy a pensar que te gusta chocar con las persona— Dijo soltándolo. El lobo de Chanyeol protestó, quería seguir en esos cálidos brazos y el Omega se sonrojó mucho al ver qué era el mismo alfa de la vez pasada. ¡Qué pena! —Soy Kyungsoo, tu futuro alfa, chiquito—le dijo y si más se fue, dejando al pobre Chanyeol consternado. 

Luego de salir de su pequeño trance se fijó que había perdido la oportunidad de llegar a tiempo. Su reporte lo espera en su calificación.