little bunny ♥︎'s sungsun

04

sunoo en verdad iba a hacerlo. iba a entregarle su cuerpo a alguien que no lo merece.

vio su vestimenta por última vez en el espejo de cuerpo completo. estaba usando una camisa de heeseung que era dos veces su tamaño, mas no le cubría más abajo de las rodillas. se sentía mal por usar la ropa del amor de su vida, pero necesitaba algo “provocativo” y era lo único que encontró en su clóset (que concordara con aquella descripción).

sunoo lo pensó muchas veces, incluso la noche anterior durmió menos de lo habitual. sus pensamientos acerca del plan de sunghoon le gastaban energías. y, aunque piense tanto, no puede llegar a una conclusión concreta. ¿cuáles eran las verdaderas intenciones de sunghoon? separarlo de heeseung es muy poco para un psicópata de pacotilla como lo era park.

debía haber algo más, siempre lo hay.

hoy en la mañana sunoo creyó haber encontrado la respuesta a sus dudas. sunghoon sólo se acercó a él por lo mismo que se acercan todos, por tener su cuerpo. nada más que tuvo una buena manera de chantajearlo para convencerlo, para que sunoo se rindiera y le diese lo que quería.

se sentía extremadamente humillado y decaído. ese era el punto al que sunoo podía llegar por lee heeseung. no le importaba tener que venderse, degradarse o incluso romperse en mil pedazos, con tal de que lee heeseung estuviera siempre bien.

casi al medio día, después de tomar una larga ducha en donde se permitió llorar un poco, le escribió a sunghoon para que viniera a su habitación. después de mandarle la ubicación y recibir una respuesta afirmativa, los nervios de sunoo aumentaron.

sunoo siguió mirando su reflejo en el espejo hasta que el timbre le hizo reaccionar.

se acercó a la puerta y al abrirla casi se desmaya. sunghoon había venido vestido con una chaqueta roja, jeans negros (un poco holgados) que llegaban hasta sus tobillos, zapatillas negras y un semblante intimidante. al menos para sunoo se sentía de esa manera.

─hola, puedes pasar ─. el azabache se adentró en su habitación sin decir palabra alguna. sunoo suspiró, su pecho seguía subiendo y bajando de manera acelerada.

sunghoon fue a parar directamente en su cama, sentándose con las piernas (levemente) abiertas, sunoo tragó duro sin poder mirarlo. comenzó a jugar con sus dedos, nervioso. odiaba sentirse así alrededor de sunghoon.

mientras tanto, park se había dado el gusto de observar detalladamente las piernas de kim.

─¿vas a decirme por qué estoy aquí? ─dijo, inclinando su cabeza hacia el costado, ansiando saber porqué su conejito lo llamó un fin de semana; lejos de la escuela y de lee heeseung.

sunoo no respondió y se sentó entre las piernas de sunghoon, este lo agarró por la cintura, confundido por su extraño comportamiento.

─sólo... quería hacerte una pequeña propuesta...

el menor humedeció sus labios con su lengua, antes de dejar un rastro de besos desde la mandíbula hasta el cuello del mayor. este suspiró pesado, los labios de sunoo sobre su piel le dan una sensación electrizante.

─¿c-cuál sería exactamente? ─. sunoo no volvió a responder, en cambio, posicionó ambas piernas a los lados de la cadera de sunghoon. haciendo que sus crecientes errecciones se rozen brevemente.

─quiero que me tomes.

“toma todo de mí, destrúyeme, hazme sufrir por dentro, pero no lastimes a lo que más quiero” quiso decir, sin embargo, su voz hubiera salido temblorosa y él quería hacerle saber a sunghoon que su propuesta iba en serio.