Me acople a mi hogar ese sentido de furia no se iba, ellos solo ellos no cabe duda que solo saben molestarme. Pero bueno pasaría la noche igual a las otras solo y sin ninguna calidez de un abrazo, a decir verdad no recuerdo que nadie me diera afecto o me hiciera sentir bien. Cerré los ojos.
----- Miren es el fenómeno.-
- Calla no ves que esta allí.-
- ¿No quieren jugar conmigo?, miren tengo su balón, les falta una persona.- sentí un golpe en la espalda para caer al suelo.
- Allí perteneces jajaja, aléjate de nosotros fenómeno.-
Los miré riendo por acción de ese, me sentí torpe, no se encajar no puedo hacer nada que corresponda a nada...
- Deja prender esa fuerza que tienes.- escuche en mi mente solo para dormir.
-----Abrí mis ojos las llamas no se sacian ese recuerdo, mire el sello activo para comenzar a perder el aliento, la magia de este drena el oxígeno así se apaga mi fierra, me comencé a tranquilizar, me eche en las cenizas de lo que es mi cama, tranquilizarme lo más complicado de mi ser gracias a ese sello logro ser lo que soy al ojo de los demás.
Paso el tiempo logrre reincorporarme, el sello me dejo egresar. Alimento busco aunque el mismo oxígeno era mi alimento puedo pasar todo los años sin probar bocado. Las miradas de todos solo por amenazar a ese. Siempre seré el antagonista de esta aldea.
- Detente allí el jefe quiere verte .-
- Bueno y sabes para ¿Qué me requiere ?.- le replique algo curioso, él desde que otorgó el sello a mi hogar no me había vuelto a solicitar.
Me dirigí a la morada de él puesto que su anunciante no me proporciono dicha información de lo que le pregunte. Entre solo para ver que me esperaba sentado en su trono, me sonrió solo él podía tomar la forma antropoide me acerque a él para inclinarme.
- Levantantate, no te humilles.-
- Para que me ha convocado.- le dije para sentarme enfrente de él y ver que se levanto de este para que con su brazo me acariciara la cabeza cosa que al instante movió, nadie puede tocarme ya que una quemadura se llevará; el contrario mostró su forma verdadera cayendo sus vestimentas de hombre y quedando su pelaje a mi vista era de color claro con una sola cola al igual que los demás.
- Sabes que solo yo puedo ser lo que viste no, tengo una pequeña encomienda para ti.- me dijo algo serio. - el que te hayas hecho más enemistad de ese clan familiar te hace y me hace más susceptible así que requiero que salgas de la aldea, será tu misión.-
- Nunca me he alejado tanto lo sabes jefe no puedo sobrevivir si "él" me toma por completo...-
- Le prometí a tus padres el cuidarte.- me sonrió pocas veces menciona eso que lo olvido por completo. - Puedes usar tu forma antropoide estando fuera, cuídate y ven cuando logres domarte a tu mismo.-
- Cuando logre eso, ¿me contarás de ellos?.-
- Claro que lo haré en un año cumples la edad para revelarte, para ese entonces se habrá apaciguado el dilema con ellos.- solo vi que regreso a la forma humanoide y sin pelaje ni nada mire sus órganos como se diferenciaba como macho ante una hembra en ese estado, cogio su ropa para volver al trono.
- Bueno si esa promesa me darás regresaré para ese tiempo.-
Salí de la choza, me era algo normal que me alejara del pueblo a donde esa miraba del atardecer del dia anterior. Pero irme de la aldea no sabía dónde estar, usar mi magia y ser una criatura salvaje que caza a nosotros. No se tal vez para que no vean mi inusual forma. Las miradas eran notorias en mi transcurso, llegué a la entrada solo para pensar si era buena idea irme. Pero saber ese detalle de mi pasado era una motivación muy importante para mí.
Salí esa era la idea camine, tal vez el estar solo seria memorable dominar a mi otra personalidad, controlar y mantener el control.
Camine por el bosque mis llamas no se encendían creo que por la paz que siento en este sitio y escuchar el viento, corrí más veloz hasta llegar a un estanque donde bebí del agua mientras lo hacía vapor se creaba solo con mantener mi osico en el agua, mire mi reflejo.
- Seguirás siendo un monstruo.- escuché, mire al rededor. Pero solo algunas mariposa estaban revoloteando. - Mejor piérdete en ti no conseguirás librarte de mi.-
Mire al reflejo del agua, y justamente no era mi reflejo si no la silueta en llamas de mi ser, sus ojos brillantes como la lava y el magna el color de su pelaje al igual que las marcas oscuras que en mis mejillas y extremidades se formaban era de las pocas veces que me veía como realmente me afigurada con la ira, solo tenía relatos de los que mi jefe me proporcionaba.
- Tu solo eres una ilusión, pero por tu culpa vivo este horror .-
- ¿Mi culpa? Yo no soy el que tiene tres colas de nacimiento yo solo soy el reflejo de todo lo que no quieres domar, soy tus miedos...- Le di una patada al agua y salí corriendo de ese largo si lo seguía escuchando seguro él terminaría tomando mi cuerpo.
Descanse de bajo de un árbol para ver que ya había avanzado demasiado y que una aldea humana estaba enfrente de mi, no le di importancia; apenas comenzaba mi caminar como errante sin pueblo, sin familia, sin cariño, sin aprecio, sin nada relevante más que mi matria por mi tribu.
