Cadenas de fuego (BORRADOR)

15.- sei il mio fottuto angelo

sei il mio fottuto angelo

Lilith

Han pasado días desde mi estúpido y planeado arresto, desde aquella vez evito cruzarme con Aamon pero a cambio de eso gane un nuevo guardaespaldas Alessandro mientras Filippo fue suspendido por tiempo indefinido de mi cuidado.

El cual una persona insoportable habla demasiado sobre asesinatos, sangre y venganza, es tan agotador escucharlo a cada minuto del día es como una tortura en bucle y estoy segura que eso también es parte de la venganza de Aamon.

Desde entonces cerro bajo llave el invernadero prohibiéndome ir a cortar fresas, y debo de admitir que las del supermercado están asquerosas contienen demasiadas cosas como aceleramiento para su crecimiento, están totalmente fertilizadas bajo sabrá dios que sustancias químicas.

Mi dosis de fresas ha sido suspendida como castigo.

Muy maduro Levard, muy maduro de tu parte.

Me encuentro entrando por milésima vez a alguna tienda cargando bolsas de ropa de diseñadores acompañada de Trys la cual no es tan terrible como lo pensé, hemos pasado mucho tiempo juntas, comemos en el restaurante Levard, le di una tarjeta de pase VIP para el Inferno, también fuimos a varias presentaciones de artistas en nuestros hoteles y casinos.

Termino de medirme un vestido hermoso cuando dos mujeres pertenecientes a la mafia me miran y las escucho susurrar bajo pero claro.

—Ves esas cicatrices, los Levard se las hicieron.

—Mi esposo dice que quizá será regresada a la mafia Italiana para que los Levard puedan obtener más poder.

Trys me mira sin decir nada y se voltea a otro lado.

Trago el nudo en mi garganta aguantando una vez más toda clase de comentario apuesto que si los chicos hubieran estado a mi lado ni siquiera hubieran levantado la mirada.

Tomo nuestras bolsas abandonando el lugar después de pagar con mi tarjeta la cual debe de estar con una cuenta tan larga como nunca lo ha estado, no es que sea un problema porque Aamon dijo que era ilimitada. Así que me encargo de pagar absolutamente todo.

Trys ahora es mi amiga y merece lo mejor de mi parte ¿o no?

—Enserio si tu guardaespaldas vuelve a tirar al suelo a otro hombre que se nos acerque—Trys me toma de sus manos—amiga, vas a quedarte sola sin ningún chico. Imagina que le hagan eso a Levi.

Lleva sus manos a su boca exageradamente.

Pensé que diría algo sobre las mujeres de hace un momento pero siempre regresa al tema de mis guardaespaldas.

Lo cual activa mis alarmas.

—Levi se apartara de ti en cuanto sepa que eres una Levard.

Y como siempre comienza a utilizar a Levi y el tema de los Levard.

—Yo lo arreglo—beso su mejilla sintiéndome agobiada—nos vemos.

Subo a la parte trasera del auto llevando mis manos a mi rezago mientras muerdo mi mejilla.

Trys algo trae entre manos y por más que quiera confiar no puedo, hay algo enorme que me grita y pesa en mis espalda que tenga cuidado. Pero jamás he tenido amigos, bueno Eva y Leonid eran mis amigos en Italia y desde entonces no he tenido a alguien además de los Levard.

No puedo perder a los pocos amigos que estoy teniendo.

Al entrar a la mansión se mantiene oscura y en silencio, camino hacia mi habitación pero me detengo cuando tomo la oportunidad de subir a la piscina de la azotea.