DÉJAME IR...

Parte 36

El verdadero amor duele como nunca nada te va a doler en la vida...

Despues de probar lo más amargo del amor

Entonces serás capaz de elegir y aprenderás a ser egoísta y serás feliz

Porque jamás volverás a amar como amaste la primera vez...

Muchos dirán que ese amor que te lastimo no era amor.

Pero lo era y era el amor en su esencia pura....

Porque ese amor era incondicional y no egoísta...

Lo que ahora sientes no es nada comparado con lo que sentiste...

Porque lo que hiciste la primera vez que amaste...

No lo harías de nuevo... porque no amas igual, ahora piensas en ti...

Claro que no deja de ser amor... pero...

Jamás esperes sentir la misma adrenalina al amar por primera vez...

Arriesgarlo todo para perderlo todo...

Porque entonces no piensas, solo importa amar...

Algunos dirán ese amor es enfermo...

Pero quien dijo que el verdadero amor es sano?

Pero eso no pasara de nuevo porque...

Tu amor de ahora es medido...

Medido por la razón y el egoísmo...

Autor: Irma Vásquez Fernández

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Entro a su enorme casa vacía, era enorme y estaba solo, pero se lo merecía, hace un mes que no lo veía, todo el trabajo lo hacía en línea y mandaba correos,

Quería buscarlo y mucho, decirle muchas cosas, quería decirle que lo siente, lo extraña.

Lo ama.

Era un amor tan egoísta tan malditamente enfermo, lo sabe, pero por la mierda que no puede alejarse de él es como su oxígeno, ellos no deberían estar juntos, su amor los consumía de tal manera tan aterradoramente obsesiva y enferma, no era sano, pero no podía dejarlo ir... por más que Taehyung suplicara que lo dejara no podía hacerlo, lo necesitaba de una manera malditamente enferma.

Siempre tuvo miedo de quedarse solo, era hijo único, sus padres lo habían dejado solo desde que tiene memoria, pero jamás se había sentido tan abandonado que cuando Taehyung se fue, no podía soportar la idea de no verlo más porque se quería volver loco, sentía que su vida dependía de que estuviera a su lado.

Aun así terminaba cagando las cosas una y otra vez, cada vez que estaban bien, hacia algo para joder las cosas y malditamente necesitaba arreglarlo después, necesitaba ayuda profesional, si.

El sonido de la puerta lo sacó de sus pensamientos.

- Jungkook...

- Jimin, ¿qué paso?

- Fui a buscar a Taehyung en su casa y no esta...

- ¿Se fue otra vez?

- No, al parecer se compró un departamento eso dijo una de sus empleadas que se fue a vivir solo...

- ¿Donde?

- Aquí en Seúl, me dio la dirección... quiero ir a hablar con él, aquí está la dirección por si quieres ir. —dijo mientras dejaba un papel en sus manos.

- Jimin... lo siento...

- Ambos somos culpables... y me arrepiento Jungkook porque lastimamos por algo que ni si quiera vale la pena. —tenía tanta razón ellos no se amaban y no pensaron en las consecuencias...

- Si, que te vaya bien, Jimin, nos vemos por ahí. —Jimin le dio una última sonrisa y se fue.

Estaba parado frente a su puerta en el piso 20, sus manos temblaban al tocar el timbre, finalmente lo hizo... segundos después la puerta se abrió dejando ver a un pelirrojo hermoso, aún estaba delgado pero su rostro estaba tan brillante y su piel más perfecta que nunca.

- Jimin... ¿qué haces aquí?

- Tae ¿puedo pasar? —sin decir nada se hizo a un lado para darle paso

El departamento era blanco con rojo sus muebles eran muy lindos, muy cómodo.

- ¿Quieres algo de tomar?

- Agua por favor. —estaba nervioso

Fue a la cocina y sirvió agua en un vaso... le extendió a Jimin y fue a sentarse frente a él.

- ¿Entonces, que necesitas? —preguntó Taehyung, su voz era fría... sin dolor sin emoción, sin sentimientos sin nervios sin timidez.

- Perdóname Taehyung, sé que no lo merezco, pero perdóname. —Jimin agachó la cabeza no quería mirar esos ojos acusadores.

- Ya lo hice, Jimin... no necesitas pedirme perdón por nada... yo ya te perdoné hace tiempo... pero no esperes que vuelva a confiar en ti... no lo haría jamás, ni siquiera me duele lo que pasó con Jungkook, de hecho, no confió en nadie no es solo contigo.

- Tae...

- Si eso es todo, Jimin... tengo muchas cosas que hacer...

- Tae... Jungkook y yo ese día estábamos borrachos realmente...

- Jimin, no me importa, seguramente llevaban bastante tiempo en eso, lo que no entiendo es porque no me lo dijeron y prefirieron hacerlo a escondidas.

- ¡Solo fue esa vez, solo esa vez y no estábamos enamorados solo fue esa vez y fue porque no estábamos pensando lo siento...!!

- Ya no importa, Jimin realmente no me importa, me vales lo mismo que me vale un sancudo, nada, puedes irte tranquilo.

- Está bien, ya me voy. —se despidió dándole una última mirada siendo incapaz de encontrar al Taehyung de antes

- Te quiero, Taehyung, siempre lo hice, lo siento. —sin esperar respuesta salió corriendo.

Cerró la puerta y se quedó ahí unos minutos.

- Te extrañé... mucho.

Jimin salió del edificio casi llorando, si que lo extrañaba ambos tenían tantas cosas, toda una vida, se arrepentía sinceramente... pero eso ya no importaba ahora.

Tendría que decirle a Yoongi que lo engañó y no sabía por dónde empezar, quizá sintió celos de Taehyung, porque todos se enamoraban de él, por eso quiso llamar la atención de Yoongi, por eso se acercó a Jungkook, si, un gran error y estaba arrepentido, pero él también quería saber que se sentía ser amado, quería saber que era que alguien se vuelva loco por él.

Nunca lo supo porqueYoongi nunca dejó de amar a Taehyung y Jungkook solo era débil, pero su corazónsiempre seria de Taehyung, era un mal amigo y no valía la pena.