Dormir de a dos
es tener un sueño profundo
no sentir que tú despiertas
no oír que abriste la puerta.
Sentir cosquillas,
tener muchas pesadillas,
tratar de gritar
tu caminar a hurtadillas.
Dormir de a dos,
es finalmente despertar
y ver una figura frente a mí
mirándome a los ojos sin piedad.
Dormir de a dos,
fue no encontrarte junto a mí
ser el único en saber como morí.
Es oír algo quebrarse,
sentir mi sangre derramarse,
tus pisadas en el pasillo lúgubre
la culpa y tu marcha fúnebre
¿Fuiste tú o fue alguién más?
es lo que muchos se preguntarán
¿Fuiste tú o fue alguién más?
Sólo tú y yo sabemos la verdad.
Dormir de a dos,
es guardar el secreto
la certeza de tener mi silencio,
y saber que nadie estuvo para verlo.
Dormir de a dos,
para mí dejar de vivir,
ver manchadas las sábanas,
de un intenso rojo carmesí.
Ignorar que deseabas,
deshacerte de mí
Desconocer que planeabas,
matar sin hacer sufrir.
Tú nombre escrito en mi piel,
mi final, amargo como hiel
¿Cómo no me di cuenta antes?
siempre has querido envenenarme.
Ignoré tus señales,
me arriesgué al jugar,
caí en lo más hondo,
de tu trampa mortal.
Dormir de a dos,
es correr peligro
es pegar un grito,
de desesperación.
Dormir de a dos,
para mí fue despertar
y ver mi cuerpo tendido
desearía no haberme rendido.
Me arrastré hacía una salida,
y luego ví que una luz se encendía
nunca desperté para el siguiente día
jamás pude decir lo que sentía.
¿Fuiste tú o fue alguién más?
has sido tú y con eso vivirás
hiciste realidad mi horrible pesadilla
Fuiste tú, no pudo ser nadie más.
Dormir de a dos
no dejar de abrazarte
dormir de a dos,
darte el poder de matarme.