I want to love you ♥︎ KM

24•

—  ¿Por qué no hemos hecho esto antes?

Preguntó Nam besando el cuello de Jin, llevaban dos semanas quedando, durmiendo juntos, saliendo literalmente, claramente era ya una relación aunque ninguno había hecho la propuesta aún. 

— Yo siempre había querido que te fijaras en mí. 

— Y me había fijado en ti. Durante los últimos años he pasado muchas horas preguntándome qué habría exactamente bajo esas camisas tan anchas. — sonrió Nam, acariciando su pecho. —. Ahora lo sé — Añadió, satisfecho. 

— ¿Te habías fijado en mí? ¿Y porqué nunca dijiste nada?

Nam se encogió de hombros.

— Soy tímido. 

A Jin le causó risa y Nam empezó a hacerle cosquillas hasta que tuvo que gritar para que lo dejase en paz. Luego él encontró sus cosquillas y fue Nam quien tuvo que gritar que parase.

— Se me ocurren muchos adjetivos para describirte, pero "tímido" no es una de ellos. 

— ¿Ah, no? ¿Y cómo me describirías? — sonrió él, pasándole una pierna por encima.

— Antipático. 

— ¿Yo? — Nam estaba demasiado preocupado por su respuesta corporal como para sentirse ofendido. El juego lo había excitadi de nuevo y se rodilla estaba rozando un territorio muy peligroso. Tenerlo tan cerca, tan disponible, era una forma de tortura porque sabía que no estaba preparado para hacerlo otra vez esa noche.

— Todos en la agencia se echan a temblar cuando tú llegas.

— ¿En serio?

— Sí, das miedo. — Río Jin —. Aunque eres muy sexy, debo reconocerlo.

— Claro que soy sexy. ¿Qué más soy?

— Listo, seductor, sorprendentemente generoso...

— Por favor, voy a ponerme colorado. — Jin tuvo que disimular un bostezo.

— Tengo sueño.

— Entonces duerme.

— ¿Vas a quedarte a dormir?

Preguntó Jin tratando de salir de sus pensamientos. Por alguna razón, Nam pensó en la pregunta que le había hecho antes: 《¿Te habías fijado en mí? ¿Por qué no dijiste nada?》
¿Por qué nunca se le había ocurrido pedirle que saliera con él? Y enseguida supo la respuesta.

— ¿Quieres saber por qué nunca te he pedido que salieras conmigo?

— Sí. 

Murmuró Jin, medio dormido.

— Por qué tenía miedo de lo que pudiera pasar cuando todo terminase. Habrías querido irte de la agencia y yo no podría soportarlo, te necesito, Jin.

Él le dio un beso en la mejilla. 

— Yo también te necesito.

Pero no era verdad. Jin podía seguir adelante sin él, era un hombre adulto de 30 años, bastante independiente. Pero si lo dejaba y no volvía a verlo.

— No me imagino llevando la agencia sin ti. — era una frase inadecuada, pero no podía expresar lo que sentía de otra forma. ¿Había sido su imaginación o Jin se apartó un poco? Nam no se movió, pensativo. Quizás era más que sentirse bien en su trabajo, tal vez existía mucho más allá.

— Nam, soy un hombre lo suficientemente adulto, como para entender muchas cosas. ¿Así que ya pregunta de una vez?

— ¿Estás seguro?

— ¿De si quiero compartir mi vida junto a ti? Pues sí. 

En lugar de decir nada lo besó despacito y él le devolvió el beso.

— Mmmmm.....¿Qué es eso que noto ahí abajo?

— Soy yo, mostrándote mi aprecio.

Jin soltó una carcajada. Y, para su sorpresa comenzó a tocarlo, algo que tuvo que detener cuando el móvil de Namjoon comenzó a vibrar, era Jungkook anunciando que deseaba hablar con él y era urgente, como Jin y él estaban en la oficina, claramente desnudos sobre el sofá, tuvieron que comenzar a vestirse rápidamente antes de ser vistos, pero por arte de magia Jungkook en compañía de Jimin abrieron la puerta sin tocar al ver que su asistente no estaba en su lugar, y los encontraron justamente colocándose los pantalones. 

— Ups, lo sentimos.

Se disculpó Jimin a punto de reír. 

— Ya no es secreto. Jin y yo somos parejas, así que no hay comentarios. ¿Pasa algo? 

Preguntó Namjoon un poco preocupado ahora, tomó lugar en su silla frente a su escritorio mientras los otros involucrados a la charla ocupaban lugar frente a él. 

— Seré directo Namjoon, no quiero mantener más este contrato con Park Jimin.

Jin abrió los ojos mientras miraba a Namjoon, pero la calma de Jimin lo preocupaba aún más. 

— ¿Qué ha pasado?

— Es tu culpa por tener trabajadores tan hermosos.

Aquellas palabras de Jungkook hizo que Nam se relajara un poco en su silla. 

— Estamos enamorados, y estoy embarazado. 

Seokjin casi se ahoga con su propia saliva tras escuchar aquella confesión, al principio Namjoon no quería decir nada, pero cuando por fin abrió la boca fue para reírse.

— ¿Qué te causa risa? — Preguntó Jimin curioso.

— Me imaginé que pasaría, Jimin tiene la habilidad de entrar en los corazones fríos como los de Jungkook. 

Jungkook arqueó una ceja ofendido ante aquel comentario, pero estaba en lo cierto, era bastante cruel en muchas ocasiones. Incluso lo fue con Jimin los primeros días de sus citas, y estuvo dispuesto a mantener esa postura despiadada a no ser por ese rubio hermoso que poco a poco comenzó a meterse muy dentro de él, estaba tan enamorado ahora, tendría un hijo con él, ahora debía plantearse muchas cosas, protegerlo de cualquiera que deseara hacerle daño y dejar ese maldito negocio que lo consumía.

— ¿Entonces podemos romper con ese contrato?

Quiso saber Jimin bastante nervioso. 

— Ninguno de los dos está obligado, tampoco les puse una pistola en sus cienes para que aceptaran, así que no hay problemas, puedo cerrar el contrato desde hoy. 

Jimin pegó un gritito eufórico, se puso de pie y abrazo con fuerza a Namjoon, al ver la mirada de Jin se alejó de él. 

— Lo siento.

Se disculpó bastante apenado.

— ¿Qué pasará con este negocio Nam? Según tengo entendido alguno de tus chicos están siendo encandilados por nuestros fríos corazones. 

Dijo Jungkook devolviendo el golpe a Nam, lejos de hacerlo ofender lo hizo reírse. 

— Quiero cerrar la agencia, hacer un viaje con Jin, creo que lo merecemos. 

Namjoon tomó la mano de Jin para entrelazar sus dedos con los suyos. 

— Nosotros también haremos un viaje.

Dijo Jungkook poniéndose de pie. 

— ¿Ah sí?

— Iremos al hospital, y luego, te llevaré a conocer a mi hermana de crianza, tiene muchas ganas de conocerte.

Jimin mostró su sonrisa. Parecía un niño a punto de recibir su mejor regalo.