capitulo 28

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Aviso:

No habrá actualizaciones del 13 al 19 de junio , ambos días inclusive. Estoy en una exposición y salgo con clientes casi todas las noches. Voy a estar exhausto, con exceso de trabajo y borracho o con resaca cuando no lo esté. Volveré el 20 de junio para escribir normalmente.

Algo anda mal en la ciudad, pensó Knight. Era obvio por los sonidos detrás de él y la falta de luz. La razón de ello se le escapaba, pero mucho en este mundo salvajemente futurista donde las linternas y las antorchas encendidas habían sido reemplazadas por filamentos alimentados con polvo, y donde la magia era aparentemente una cosa del pasado. Todo era tan difícil de entender y todo tan fuera de lugar.

Esto, sin embargo. Esto, lo entendió. Knight respiró hondo el aire fresco de la tarde mientras contemplaba las llanuras a las afueras de Vale, la horda de criaturas blancas y negras que tenía ante él con sus brillantes ojos rojos. Tal ejército se interponía entre él y su amo que le recordaba la invasión de Vale por parte de Salem en su mundo. Ella había sido mucho peor, por supuesto, lanzando criaturas de gusanos carnívoros a la ciudad y destrozando las paredes con su poder. Salem se había tomado su tiempo para hacerlos sufrir para su propia diversión.

Esto, su hijo, fue más directo. Knight apreció eso.

Sacando su espada, la clavó en el suelo y tiró hacia atrás su capa. Se arrodilló, tocó la hierba con una mano y cerró los ojos brevemente. Su poder se extendió, cantando bajo tierra en busca de metal. Encontró un montón. Por otra parte, esta ciudad era más de metal que de piedra y madera. Gran parte de ella probablemente era importante de una forma u otra. Tendría que disculparse más tarde por usurparlo. Las tuberías y el cableado de metal de pulgadas de espesor se rompieron y enrollaron bajo tierra, se volvieron de color rojo cereza y se calentaban como escoria, luego se precipitaron a través del suelo para estallar y envolverlo. Ardiente, habría derretido la carne de cualquiera, incluido él mismo, si no fuera por su Pasivo que lo protege. No podía sufrir ningún daño por el calor de su propia forja. Tan divertido pensar, hace años, que había descartado tal Pasiva como mera conveniencia y nada más.

Concentrándose, dio forma al metal como si lo hubiera hecho con un martillo y una fragua, empujándolo y moldeándolo, estirando eslabones y atando hilos fundidos como cuerdas, y luego enfriándolos rápidamente. Endurecimiento, revenido, todo en tiempo real y sin fragua. Al cabo de un minuto, no más de sesenta segundos, volvió a ponerse de pie, resplandeciente con una reluciente armadura de placas que le cubría desde los pies hasta el cuello. Más se filtró sobre su cabeza, cubriendo su cabello y rostro antes de endurecerse hasta convertirse en acero plateado. Solo entonces, encerrado, recogió su espada una vez más y la blandió.

Ozpin había temido una audiencia para su pelea, pero las paredes estaban vacías excepto por unos pocos defensores. Contarían historias de esto, estaba seguro, y esas historias serían difíciles de reprimir para Ozpin y Ironwood. Sin embargo, mientras ellos y todos en Beacon estuvieran vivos para reprimirlos, daría por terminado su trabajo.

Más de un millón de Grimm para mí, pensó Jaune con no poca diversión. Debería estar halagado.

Sin embargo, no estaban atacando.

"Soy Jaune Arc". Knight bramó. "Rey de Vale y sus pueblos". No este Vale, pero aun así, Ellayne se lo había metido en la cabeza, y no estaba dispuesto a molestarla ignorándolo ahora. "¿Hablarías conmigo, Grimm?"

Para su sorpresa, la horda se separó por la mitad para dejar al descubierto al hombre al que casi había matado antes. Grimm se veía saludable de nuevo, lo cual era más de lo que se podía decir de Ashari. Su piel blanca pastosa y sus ojos rojos se veían apagados. Por un momento, Knight pensó que estaba roto, pero luego vio la forma en que los hombros del hombre colgaban y el Beowolf que lo sostenía al soportar gran parte de su peso, y se dio cuenta de que estaba exhausto. Invocar tanto a Grimm debe haberle costado mucho. Sangre y energía. Si lo alcanzo, no podrá pelear en absoluto.

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