K I M T A E H Y U N G's pov
No paraba de mover el móvil entre mis manos sobre la mesa de madera caoba de la cocina. ¿Debería mandarle el mensaje? ¡Diablos! ¿Desde cuando Kim Taehyung se preocupaba en casos como este? Me estaba exasperando. Removí mi pelo con la mano, dejando el móvil reposar en la mesa para luego coger la lata de cerveza y darle largos tragos. Sentí un golpe en el hombro, del cual me giré a ver quien era.
- Al fin terminamos de organizar el atraco, ¿crees que va a funcionar? - Jungkook, el maknae del grupo, aunque para nosotros era apodado como golden maknae, se había sentado en el taburete que estaba a mi lado. Me miró fijamente, aunque era una costumbre, acompañado de una sonrisa esperando a que le respondiera. Le miré y de igual manera sonreí.
- De seguro que sí, por ahora no hemos fallado ninguno, y creo que este no será el primero en el que lo hagamos. - Su pelo negro como el carbón se removió en su frente mientras reía a carcajada limpia.
- Toca madera por si viene la mala suerte - dio débiles golpes en la mesa de la cocina. Asentí sonriendo e imité sus movimientos. Escuchamos algunos pasos entrar a la cocina.
- ¿Qué estáis haciendo? - Suga había entrado, tenía los ojos más pequeños de lo habitual. Se notaba que recién había despertado de la siesta de la que se había dado el lujo de darse tras la organización de nuestro hobbie.
- ¡Dandole suerte a Bangtan! - Exclamé, haciendo la forma de un puño con la mano, alzándola. Bangtan era como nos hacíamos llamar todos nosotros, éramos los chicos a prueba de balas.
- Me parece perfecto - Y sonrió, dejando ver sus dientes - Pero no la necesitamos - Eramos la modestia personificada, pero si no nos animábamos nosotros creo que nadie iba a hacerlo, pero también cabe decir que éramos buenos haciendo lo que hacíamos. - Por cierto, tengo hambre.
- Llama a Jin, de seguro quiere preparar algo, está algo animado con la clases online de cocina que encontró. - Avisó Jungkook, y tras eso, Suga salió de la cocina sin decir nada más, solo arrastrando sus zapatillas por el suelo de parquet.
- No sé que hacer... ¿debo mandarlo?
- Claro, dile quién eres, a lo mejor lo está esperando.
- De seguro que no - bufé.
- Si en verdad eres un romántico Taehyung - Dijo esto en broma, pero ambos sabíamos que era verdad. Aunque yo había tenido un mal historial con las mujeres, cada vez que me enamoraba de alguien, lo hacía de verdad y muy rápido. Fallo mío. Yo reí - ¿Por qué te has pillado tanto por esa chica?
- Realmente no lo se. Sentí cosas que nunca antes había sentido con alguna chica.
- ¿No dijiste que no habíais hecho nada? - Negué con la cabeza.
- Y no lo hicimos
- Me he perdido, tendrás que explicarme.
- Desde que entró a la discoteca, llamó mi atención. Al verla, callé, quería observarla pero cada vez que me preocupaba por seguir sus pasos, me atraía más. Hasta ahí, eso es lo que sabías, ¿verdad? - le hice participe de la conversación, y el asintió respondiendo mi pregunta. - Luego me di cuenta de que Jimin y Suga estaban en la barra, pagaron las bebidas de ella y su amiga, mientras decían cosas entre ellos sobre las chicas, así que esperé y antes de que esos bribones le hicieran algo más, me acerqué a ella para invitarle algo y poder hablarle, pero ya estaba con el alcohol por las nubes. - Sonreí. - La iba a llevar a su casa en mi coche, pero se quedó dormida y la llevé a pasar la noche en mi apartamento, donde yo no pegué ojo, me quedé la noche en vela mirándole. observándola moverse en mi cama mientras dormía, es preciosa.
