Hacía frío, temblaba, aunque su cuerpo hervía por dentro. Abrió los ojos, pero la luz hirió sus retinas. Volvió a cerrarlos. Tenía miedo. Gritó, se revolvió, mordió el aire y las cuerdas, pero nadie vino a ayudarlo. Su cuerpo le dolía, las cadenas le dolían, estaba herido, sangraba, ¿por qué nadie lo ayudaba? Levantó la cabeza, buscándola, llamándola, ¿dónde estaba ella? No estaba. El dolor creció en su pecho. Volvió a revolverse. No era fuerte, no podía luchar. Se quedó inmóvil, dejó que las manos lo tocaran, que las cuerdas lo apresaran, que el frío lo invadiera, y de esa forma se convirtió en esclavo.
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Capere Ventus
Fantasy"Margalís mató un niño. Un niño gris de un solo ojo. El aire escuchó su lamento y Margalís apresó el viento. La roca protegió su cuerpo y Margalís destruyó la tierra. La llama revivió su alma y Margalís apagó el fuego. La gota contó su historia y Ma...