Capítulo IV

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Al entrar al castillo, veía que era hermoso con las velas iluminando todo, el hombre me llama asi que voy a paso rápido hasta llegar a una sala con una mesa larga con muchas comida.

Ven, come.-dijo el hombre de forma autoritaria, yo sólo me dediqué a asentir y a sentarme sin rechistar ya que tenía hambre, el se sienta a mi lado y empieza a comer-

Miro mi plato y agarró un tenedor para empezar a comer sin apuro, al terminar mi comida lo escucho decir.

Puedes quedarte aqui en el castillo pero tienes prohibido ir al ala oeste, ese lugar es privado.-dijo parandose de ahí, yo le sonrei y le agradecí con la mirada  pero el solo me mira y se va al ala oeste-

Tal vez sea su habitación.

Me levanto y camino hacia la primera parte de el castillo, estaba perdida pero miraba curiosa el luga, tenía muchas habitaciónes, al entrar a la última veo una habitación con las paredes pintadas de lila y celeste pastel, también había una cama espaciosa, al parecer era la habitación de una joven, me quito el calzado para acostarme en la cama y acurrucarme en ella.

Mire el techo blanco y en mi mente apareció la imagen del hombre, todavía no sabia su nombre ni que había pasado aquí pero estaba agradecida con el por dejarme quedarme en el castillo. Entre tantos pensamientos mis párpados empiezan a pesar quedándome dormida.

A la mañana siguiente abro mis ojos con pesar, nose porque pero tenía el sentimiento(presentimiento) de que alguien a la noche me miraba pero no me incomodaba, era un sentimiento raro y confuso, sólo sabía que estaba cómoda, al levantarme veo un hermoso vestido sencillo y hermoso.

Me acerco para tocarlo, era sedoso y muy bonito, lo agarró y de el cae una nota así que la abro y me asombro al leer su contenido.

Úsalo, se te verá muy bonito (LM)

¿LM? ¿Que significará?...lo único que sabía era que le pertenecía al hombre que me dio hospedaje aquí. Rápido me acerco al tocado y me lo pongo, una vez lista me acerco al espejo y me veo, al verme me quedé sin habla ya que nunca me veía al espejo.

El vestido me quedaba hermoso, mi pelo marrón, mis ojos color avellana y mi tez morena resaltaban.

Soy hermosa, nunca pensé que lo era.

Salgo de la habitación para irme hacia la cocina, al llegar lo veo mientras el tomaba un café mirando por la ventana.

Se veía bien, traía una camisa holgada con la misma capa negra, su pelo estaba alborotado pero lo que más llano mi atención un collar que tenía un emblema de un lobo.

Buenos días señor.-dije tímidamente, el se giró y se sorprendió al verme pero luego puso su mirada seria-

Buenos días...-dijo, así que me senté a desayunar tranquila mientras el me miraba de vez en cuando, así que decido romper el silencio-

¿Cómo se llama usted? No le pregunté el nombre.-dije curiosa pero el no me miro-

Mi nombre es Lord Mort.-dijo el dejando su café y me ve, sinceramente su mirada hacia que me pusiera nerviosa-¿Cual es el tuyo?.-pregunto curioso-

Un gustó conocerlo...mi nombre es Edalyn Cruz.-digo sonriendo, el se levanta camino hacia la puerta para irse pero antes se detiene-

Bienvenida a mi castillo señorita Cruz.-dijo serio para irse a otra parte-

Al terminar mi desayuno me levanto para empezar a caminar hacia el jardín, ese bello jardín lleno de hermosas rosas rojas, me acerco y las huelo.

Son tan hermosas.-dije sonriendo-iggy

Si que lo son.-dijo una voz, al escucharla me asusto por completo así que me giró y lo veo ahí, este tomo una rosa y la corto con una tijera para darmela, sonrojada la acepto y la detrás de mi oreja-

Tenemos que hablar de algo importante.-dije timida mientras el miraba su jardín-

¿Que?.-preguntó, quitando su pequeña sonrisa de sus labios, suspiró y lo miro-

¿De dónde salió este castillo? ¿Quién eres en verdad? ¿Que sucedió aquí?.-dije de forma rápida, tropezando las palabras, el sólo se da vuelta y suspira-

Hablaré cuando sea el momento adecuado.-dice yéndose de ahi-

Voy hacia el segundo piso del castillo y empiezo a caminar por allí que quedaba en el ala oeste, veo una puerta roja a lo último así que me acerco y la abro con cuidado, al ver que había adentro me quedo sin aire ya que había una enorme biblioteca llena de libros.

¡OH POR DIOS! ¡ESTO ES UN SUEÑO HECHO REALIDAD!.-grito emocionada mirando curiosa todos los libros, seguía en mi burbuja pero una risa me saca de ella, en una mesa estaba el sentado con un libro en la mano y varios en la mesa, este tenía una mirada divertida, al verlo lo miro apenada-

Perdón, no sabía que este lugar es privado para usted.-dije tímida, el se levantó y acercó con otro libro en la mano, se paró muy pero muy cerca de mi cuando alce mi mirada tenía su cara muy cerca de la mía...eso me ponía nerviosa.

No pidas perdón Edalyn...esta biblioteca es tuya apartir de ahora y puedes venir las veces que quieras.-al escucharlo mi mirada se llena de ilusión así que lo abrazo, este se sorprende pero corresponde, nos separamos y nos miramos a los ojos-

Bueno, esto era una guerra de miradas porque no dejaba de mirarme y yo tampoco, el bajo su vista hacia mis labios y yo también , así que poco a poco nos acercabamos más, pensé que nos íbamos a besar pero el solo me da un beso en la frente para dejarme el libro que estaba leyendo e irse de allí.

Yo había aguantado la respiración de lo nerviosa que estaba, yo enserio quería besarlo.

Mi hermoso moustro||Jhonny Deep||Donde viven las historias. Descúbrelo ahora