Una nueva leyenda

El soldado defectuoso

Al escuchar todo esto, Grievous estaba furioso y atónito, no sabía como reaccionar. De golpe, se levantó y cojió por el cuello a Cassian, el cual había estado callado todo el tiempo.

Grievous: ¿¡Y tu por qué estás aquí!? ¿También has venido a engañarme? Todos me habeis engañado, os mataré a todos.

Cassian, nervioso, dió un golpe al brazo de Grievous, haciendo que cayera al suelo.

Cassian: Dejádme explicarme... Como veis yo soy uno de los capitanes del ejército clon, pero...

De golpe, se quita el casco, dejándo ver un rostro totalmente diferente al de los demás clones.

Cassian: Yo no fuí clonado a partir de Jango Fett, mi ADN es totalmente desconocido, no se sabe de quién viene ni cómo he sido el único en ser diferente, podemos decir que soy un fallo del sistema, y como consecuéncia, a parte de mi físico, mi forma de pensar y mi personalidad son totalmente diferentes.

Vizlio: ¿Y que tiene que ver esto con que estés aquí con nosotros?

Cassian: Bien, nunca he estado muy de acuerdo con el consejo Jedi, nuestros líderes nos trataban como armas, sin sentimientos ni compasión, su código Jedi es una falacia: sin emoción, no hay paz, sin caos, no hay armonía... Llegó un momento en que decidí tomar mis própias riendas, mis compañeros clon solo se limitaban a seguir órdenes, pero esta guerra era totalmente corrupta y los únicos afectados éramos los civiles y los combatientes. Gracias a mi determinación, pude ver como Vizlio robaba los documentos durante uno de los batallones en los que se veian los sucesos pasados de Grievous... en ese momento, empecé a seguirle la pista a Vizlio, ya que él me llevaría hasta Grievous tarde o temprano... Tanto Grievous como yo hemos sido utilizados como armas, modificados y hechos para el beneficio de nuestros superiores. A partir de aquí, mi misión fue intentar encontrarte en persona e informarte de la realidad, pero veo que Vizlio se me adelantó...

Vizlio: Pues al parecer nuestras historias no son tan diferentes como esperábamos.

Grievous no sabía como reaccionar, se limitaba a hacer murmullos y gritos de desesperación, ya que toda su vida en los Separatistas había sido una mentira.

Grievous: ¿Y ahora que hacemos aquí? Estúpidos

Vizlio de repente baja la mirada, y poco a poco se acercó a Grievous, agachado.

Vizlio: Grievous, soy consciente de que tienes los conocimientos de todas las artes Jedi, así que te pido que me entrenes como tu discípulo, necesitarás ayudantes para poder sobrevivir en este planeta y la República nos estará siguiendo la pista por siempre ¿verdad?

Cassian de golpe interrumpe la conversación

Cassian: Me temo que la República ya no existe... El canciller Palpatine, también conocido como Darth Sidious, ha estado planeando un complot en contra de los Jedi, transformando la República en el Imperio Galáctico, y yo al ser sospechoso por mi rebeldía y mis conocimientos excesivos sobre el plan, también era un blanco asegurado cuando iniciase la Orden 66.

Grievous se queda paralizado, mientras coje dos de sus sables de luz...