Lumity- Relatos +18

Cap. 10 - Yo Mando.

Eran alrededor de las 8:00pm cuando Amity llegó por fin a casa. Luz escuchó desde la cocina que la puerta se cerraba mientras ella terminaba de preparar la cena. Hoy era un día especial, era el cumpleaños de Amity, así que era momento de complacer a su novia y hacer todo tipo de cosas que le gustan. Entre esas cosas estaba su comida favorita, salir con sus amigas, pasar tiempo con su novia Luz y, por supuesto, tener un buen sexo.

Para Amity no había problema si Luz era quien dominaba, pero también disfrutaba demasiado cuando ella tenía que llevar el asunto en sus manos. Le encanta sentir cierto poder sobre su novia, y eso es precisamente lo que Luz va a darle éste día, su regalo de cumpleaños sería dejar hacer a Amity lo que le plazca, incluso si eso implicaba salir de su zona de confort.

L: Mi amor, qué bueno que llegas, acabo de terminar la cena.- La mencionada sonríe y se sienta a la mesa, apreciando el festín que había preparado la morena.

A: Se ve delicioso, gracias.- Recibe un pequeño beso en la frente y Luz se sienta con ella para empezar a comer juntas.

L: Nada que agradecer, hoy es tu día especial. Después de ésto te daré otra sorpresa, creo que te gustará.- Con picardía guiña el ojo y Amity se sonroja, suponiendo lo que viene.

Sin tardar mucho, ambas terminan de comer y se dirigen a su cuarto, entre besos y caricias entre ambas.

Luz pone en marcha su plan y empuja a la bruja a la cama, cayendo sentada y mirando a la latina, quien quitaba lentamente su ropa y la miraba con lujuria impregnada en los ojos.

L: Hoy, por ser tu día especial, voy a dejarte hacer lo que desees con mi cuerpo. Todo es tuyo, eres libre de hacer lo que te plazca.- Terminó la oración sentándose a horcajadas en Amity, quién de inmediato se sonrojó por la propuesta de su novia, a la cual no podía negarse porque eso la encendía demasiado.

A: Y si te hago daño? O si no te gusta?- Las dudas comenzaron a brincar, pero estaba demasiado emocionada por lo que podía hacer ahora, así que solo dejó ser callada con un beso y un "confío en ti" que fue suficiente para comenzar a tomar a Luz.

Comenzó con caricias suaves en sus pechos, a las cuales Luz no podía evitar suspirar y retorcerse un poco. Luego la hizo quedar acostada sobre la cama, mientras Amity se quitaba la ropa, bastante rápido para su gusto, no podía esperar para follarse a su novia. Follarla como nunca lo había hecho, y ahora que tiene su permiso, no va a detenerse con pequeñeces.

Tomó ambas manos de la latina y las subió por encima de su cabeza, dejándola inmóvil con una mano, y con la otra bajó hasta tocar el centro húmedo de Luz, que pedía por ella.

Sin esperar, metió dos dedos dentro de Luz y los comenzó a mover duro, haciendo que la morena gimiera fuerte por sus embestidas.

L: Ah- Amity, qué bien se siente... Oh!- Mientras movía sus dedos, con el pulgar hizo movimientos sobre su clítoris y besó e incluso mordió su cuello un poco, pero a Luz no parecía importarle, estaba sintiendo dentro de ella los dedos de su novia y eso era mejor que recibir un par de mordidas.

Amity detuvo sus movimientos y se quitó de encima de Luz, solo para dar una orden:

A: Date la vuelta.- Dijo seria, mientras la miraba a los ojos.

Obedeció y Luz se puso a cuatro patas, dejando al descubierto todo su coño mojado. Todo un espectáculo para la bruja.

A: Ahora que me diste permiso de usar tu cuerpo, había querido hacer algunas cosas...- Metió de nuevo sus dedos en la cavidad de la humana, moviendolos lento para torturarla un poco. Mientras, Luz se mantenía jadeando.

L: Qué clase de cosas? Ah! Amity!- Su pregunta fue interrumpida por la sensación de la lengua de la bruja pasando desde su clítoris hasta casi llegar a su ano, la sensación era malditamente buena para Luz y no pudo evitar gemir.

Amity chupó un par de veces más la vagina de su contraria, mientras se deleitaba con sus gemidos. Se levantó de nuevo y algo brusco tomó a Luz de la cadera, para acostarse de espaldas a la cama. Hizo un círculo de hechizo con su dedo, haciendo aparecer baba de abominación y haciendo que las manos de Luz quedaran atadas con ésta a la moldura de la cama, por encima de su cabeza.

A: Es mejor si te lo muestro.- Con Luz atada a la cama, se inclinó de nuevo para hacerle un oral a su novia, mientras con su mano dominante se tocaba ella misma.

L: Ah- Amor... ¿Qué tal si me sueltas?- Luz no puede evitar jadear mientras habla (o eso intenta).

A: Creo que es mejor que te quedes así, es una buena posición para lo que quiero hacer. Además... Yo mando.- Levantó la mitad de su cuerpo y se puso entre las piernas de la morena, de nuevo formando un círculo con su dedo y haciendo aparecer un juguete. Juguete que había tiempo había querido usar.

L: Santa Madre...- Con algo de miedo y asombro, Luz mira aquél arnés en las manos de su novia. Pero ella ha hecho una promesa, así que se calla y no reclama nada.

Despacio Amity se pone de pie junto a la cama y se coloca las cuerdas alrededor de las piernas y deja colgando el no tan pequeño consolador.

Una vez que se acomoda de nuevo entre las piernas de Luz (que sigue con algo de miedo y excitación a la vez), frota el miembro entre los labios resbaladizos de Luz, recogiendo algo de su lubricación.

A: Sabes? Había querido hacer esto desde hace algún tiempo.- Con una sonrisa coloca la punta en la entrada de Luz. -Gracias por el regalo.- Sin esperar más, empuja la protuberancia hacia adentro de la humana, haciendo que suelte un gemido demasiado fuerte.

L: Oh! Amity!- Chilla con dolor y placer al mismo tiempo, sin poder moverse mucho por las ataduras en sus muñecas.

Amity aún con una sonrisa embobada, bombea dentro y fuera de la vagina de Luz, aunque la mencionada gritara por piedad con sus gemidos, eso solo motiva a Amity a ir más rápido y profundo. Toma las piernas de Luz por detrás de sus rodillas y las levanta, ahora en ésta posición es más fácil tocar sus puntos sensibles y hacer gritar aún más a la morena.

A: Oh, Luz! Eres demasiado buena... Ah! Tan estrecha y tan húmeda que resbalo perfecto.- Sí, ella estaba disfrutando eso demasiado. Tanto, que se sentía llegar solo de escuchar el choque de sus pieles, fuertes como palmadas húmedas.

L: ¡No aguanto! ¡No aguanto! Estoy demasiado cerca, Amity ¡Ah! ¡Ah!- A éstas alturas la latina se sentía desfallecer, se sentía demasiado bien que estuvieran golpeando dentro de ella. Cada punto dentro de su ser estaba demasiado sensible, y tenía razón, estaba muy cerca del orgasmo.

Emocionada por el momento, la bruja toca el clítoris de Luz al mismo tiempo que la penetra, haciendo que ésta arqueara la espalda. La morena termina de perder la cabeza cuando Amity chupa sus pezones, ella grita de placer teniendo por fin el deseado orgasmo.

La bruja por su parte, también llega al orgasmo, causado por penetrar a su novia y escucharla tan excitada. Además de verla tan sumisa por ella, atada y gimiendo su nombre.

Una vez que se calmaron, Amity deshace la baba de las manos de Luz y se acuesta con ella en brazos, acariciando su abdomen y enterrando su cara en el cuello de su novia.

A: Discúlpame si fui demasiado brusca, no debí dejarme llevar tanto.- Se disculpa con pena y un tanto sonrojada.

L: Descuida, lo disfruté mucho.- Con la respiración pesada aún, le sonrió y luego cerró los ojos. -Feliz cumpleaños.- Cayó por fin dormida y Amity se dispuso a descansar también con una sonrisa en los labios y totalmente satisfecha.

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He vuelto!
Desaparecí un tiempo, pero aquí andamos al millón.

Espero no tardar tanto en actualizar la siguiente parte, me despido.

~Nath.