Habia pasado casi media hora cuando empezamos a ver como todo el mundo salia de la casa gritando que venia la policia. Cogí a Kayla del brazo y empezamos a correr.
Llevabamos unos diez minutos corriendo y note como Kayla empezaba a flaquear, mire atrás y como vi que ya no habai nadie pare. Aunque no lo reconoza, ella me lo agradeció. Nos encontrábamos en un descampado muy a las afueras de la ciudad. Me senté en el suelo y ella hizo lo mismo, estaba muy cansada y apoyo su cabeza en mi hombro, la rodee con mis brazos para que no cogiese frío.
-¿Porqué eres tan bueno conmigo? últimamente me he comportado como una atentica idiota persiguiendo a Will- lo dijo y supe que me lo preguntaba en serio.
-Porque te quiero sabes, y eso es lo que se hace con las personas a las que se quiere Kayla. Siempre voy a protegerte, siempre.- le cayó una lágrima del ojo derecho, su cara se acercó un poco más a la mia. Nuestros labios chocaron.