Recuerdos del ayer

El comienzo del plan

Hello there! Acá un nuevo capítulo de esta historia. Los próximos serán un poco más basados en psicología y los tengo trabajados desde hace unas semanas en que venía trabajando en esta historia, así que no podré hacer muchos cambios si sugieren algunos.

De todas maneras dejen sus comentarios, apuestas de que creen que ocurrirá, los leo, soy feliz leyéndolos. Yo escribo y ustedes leen y comentan, no hay persona más feliz que yo cuando leo un comentario jaja. 

Sé que los publico muy seguido, pero me encantaría que comentaran o me enviaran por interno sus opiniones de cada capítulo  como ya hay algunos haciéndolo jaja. 

Tonra miraba a la senadora. Podía conseguirle una distracción, no tenía problemas con eso. Lo que le preocupaba era que ella fuera a meterse en problemas de verdad.

- Senadora, sabe que ese jedi no está acá para protegerla, no sé las intenciones de los jedi al aceptar enviar una escolta, pero si sé que las intenciones del senado son vigilarla, ese jedi está esperando su mínimo error para entregarla a la justicia- dijo Tonra y Padmé se mordió el labio.

- Lo sé, sé que él me llevaría a la justicia si hiciera algo ilegal, pero no haré nada ilegal- dijo Padmé mirando a Tonra- Por favor Tonra, sabes que realmente necesito llevar a cabo esta misión

- ¿Es por usted o para reparar el error que cometió?- preguntó Tonra sabiendo que Sabé lo haría pero a él le quedaba algo de renuencia.

- Por ambas, es lo que siempre he querido desde que vi la realidad en Tatooine, y es porque por mi error mucha gente sufrió, aún puedo reparar ese daño- dijo Padmé y Tonra negó.

- ¿Y si lo empeora? ¿Si nuevamente las cosas salen mal?- preguntó Tonra- Me siento egoísta, pero la gente tiene una república que los podrá salvar si usted comete un error, una república que los protege ¿Pero quién la protegerá a usted si comete un error? No podrá salvarse nuevamente- dijo Tonra y Padmé miró hacia abajo para luego levantar la mirada.

- Fallé una vez, no cometeré el mismo error dos veces, y si algo sale más, aceptaré la muerte- dijo Padmé y Tonra asintió intentando respirar para decidir.

¿Qué sería de Sabé sin Padmé? ¿Qué sería de todos sin ella? Si ella se equivocaba nuevamente, por más buenas que fueran sus intenciones, la república no la perdonaría. Los jedi no la perdonarían.

Las prisiones de la república eran lugares crueles, pero las prisiones de los jedi, había prisiones que nadie en la galaxia sabía su ubicación. 

Padmé sabía que Tonra pensaba en eso. Ella sabía de las prisiones de los jedi, Lord Sidious le había hablado de eso. Había una prisión llamada El Prisma ubicada en la sexta luna de Diab. Averiguar qué ocultaban los jedi allí era uno de los pendientes que Padmé tenía, y una carta bajo la manga para impedir que ejecutaran a Lord Sidious.

Lord Sidious se había salvado solamente porque el código jedi lo impedía, pero se estaban haciendo modificaciones al código para acabar con enemigos extremadamente peligrosos como él. Padmé sabía que estaba mal, que los crímenes de Lord Sidious eran horribles, pero estaba pagando por eso, ¿Ejecutarlo? Ella no quería pensar en eso, no podía. 

Pero ahora eso no importaba, lo que importaba era que ella pudiera avanzar en su plan de liberación de esclavos y encontrar un buen lugar donde ellos comenzaran nuevamente.

Tenía dinero, no solo el dinero heredado de ese asqueroso matrimonio con el infame Rush Clovis, sino también el dinero que Palpatine le había dado para sus planes. No sabía si sus intenciones eran buenas, probablemente no, pero ella lo usaría de buena manera.