•Epilogo•

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Dian

Ver a Lando salir de esa manera de la habitación solo me hacia darme cuenta de que en verdad lo podía perder y no seria su culpa si esto llega a su fin, sería únicamente la mía.

Me tire en la cama y me hice un ovillo para llorar, mis lágrimas caían una tras otra sintiendo un fuerte dolor en mi corazón y un vacío.

-Perdóname amor, por favor - decía hablando sola

Recuerdo que esas palabras salían de mi boca pero no recuerdo que Lando haya regresado.
A la mañana siguiente mi cabeza explotaba, mi garganta estaba seca, mis ojos hinchados y solo quería quedarme en cama.
Pero eso no podía ser así, era día de carrera y debía ponerme bien así que debía buscar una farmacia porque el dolor de cabeza me estaba matando.

Salí del hotel y camine unas tres cuadras donde había una farmacia y en frente una cafetería. Compre unas pastillas y cruce para comprar mis adorado Latte. Llegaban muchas noticias de lo que iba a ser el gran premio, así que me distraje en leer mientras caminaba de regreso al hotel para pensar como disculparme con mi novio y arreglar las cosas, él tenía la razón, nunca me ha dado motivos para desconfiar de él y yo lo amo más que nadie en el mundo.

Sonó mi celular y saque para ver de que se
trataba cuando me choque con alguien

Dian- lo siento mucho - alce ni mirada y era ella, era Kate, la ex novia de Lando que salía del hotel

-Mira por donde caminas niña, no vaya ser que a la próxima persona la embarres de café - Dicho eso siguió su camino y yo me quedé paralizada observándola Segundos después mi celular sono

Lando- Amor, tenemos que hablar - dijo al instante en que respondí

Dian- Claro - dije con mi voz entre cortada aún con la mirada fija en esa chica

Lando- Perfecto , voy a tu habitación - Cerré la llamada

Y todo lo que venia pensando hace un rato, se envolvió en una gran tela de duda. Y aquí estoy yo de nuevo, intentándo tomar valor para soportar lo que se viene ¿Lando pasó la noche con ella? ¿El ... el va a dejarme?

No iba a permitirme perder al chico de mis sueños, no iba a dejárselo a esa arpia.

Al volver a la habitación él estaba en el pasillo esperándome con su cara de angustia

Lando- mi amor - corrió a abrazarme - amor perdóname es solo que no sabes todo lo que está pasando en mi cabeza yo yo lo siento

La imagen de Kate saliendo del hotel revoloteaba mi cabeza, mis ojos se llenaron de lágrimas y no fui capas de decir nada solo me aferré a Lando, no quería soltarlo, no quería dejarlo.

Aparentemente todo estuvo bien durante una semana, Lando y yo viajamos a Mexico y por fin Alethia llegó, quería hablar con ella y escuchar sus sabios consejos pero al parecer ellos tenían sus propios problemas.

Había soñado tantas veces con una relación como la que tenía con Lando, que una parte de mi temía convertirse en esa mujer que perdonaba todo con tal de no perder al hombre.

Lando- haz estado muy tranquila estos días ¿estás bien?

Dian- si, solo estoy cansada y quiero volver a casa - y eso era verdad, quería poner todo el maldito océano de distancia entre esa tipa y nosotros.

Mexico era una locura, si el GP de Texas me voló la cabeza este sin duda alguna me volvería loca, Estuve todo el día sábado después de la calificación con Daniel, nos llevaron a un lugar de Mexico con unos barquitos, según dijeron que se llamaban trajineras, Daniel y yo la pasamos genial, aunque era una actividad de el yo me divertí mucho

La fotógrafa de McLaren ( libro 3 )Donde viven las historias. Descúbrelo ahora