35. La Verdad

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Thuban avanzó, sintiendo frío y cansancio, debido a la pérdida de sangre...

Había dejado un rastro carmesí por todo su largo trayecto...

Se apoyó en la pared unos instantes, para recobrar un poco el aliento y las fuerzas...

Cerró los ojos por unos instantes, y luego al abrirlos, ya no se encontraba en el templo...

Ahora estaba en una especie de cueva muy oscura, con un gran lago negro, y una balsa con una pequeña lámpara en frente

Una figura delgada, con una túnica roida de color negro, que lo cubría por completo, menos sus manos huesudas, se extendió hacia él

—Obolos por el viaje...- le habló con voz de ultratumba...

En ese momento Thuban comprendió que se encontraba ante un Caronte...

Un antiguo barquero que transportaba las almas a través del río que dividía el mundo de los vivos del mundo de los muertos...

Thuban lo miró jadeante y metió una mano en su bolsillo, para sacar dos galeones... Pero su coordinación no era muy buena en esos instantes

—Que sean dos...-

Alguien habló a sus espaldas

Cuatro monedas de plata le fueron pagados al Caronte, que las aceptó...

Thuban volteó tan rápido como pudo, para mirar a su lado

James estaba de pie, junto a él, y se veía de su edad...

Por la sorpresa, sus piernas fallaron y el azabache lo sostuvo justo a tiempo

—¿Eres tú, James?.- le preguntó mirándolo fijamente con sorpresa y aflicción...

El pequeño azabache lo tomó de la cintura y lo ayudó a caminar, para sentarse juntos en la barca...

El Caronte comenzó a llevarlos

—¿Cómo es posible que estés...?.-

—Calla, eres un inconsciente Thuban, ¿por qué te has cortado tan profundo?... Jeez... no tienes remedio, maldito idiota...-

James tomó la mano del castañito, y con un movimiento de dedos, envolvió su muñeca para parar el sangrado con hilos plateados a modo de vendas..

Thuban lo miraba asombrado, por la seriedad del que fue su mejor amigo desde siempre, parecía más maduro, y no sólo por su apariencia física...

Lentamente subió su mano sana hacia la cabeza del azabache y le dio una leve caricia mientras le sonreía

—¿Cuánto tiempo me fui, para que crecieras así?, seguro iremos juntos a Hogwarts ahora...- bromeó un poco cansado...

James hizo una mueca, y Thuban se acercó para dejar caer su cabeza en su hombro

El azabache se sonrojó y se puso rígido por un instante...

—¿Qué sucede?.- James le preguntó procurando sonar normal y tranquilizar su tonto corazón, que le había dado un vuelco en su pecho

—Tengo un poco de frío, y tú estas calentito...-

El pequeño Potter, apretó los labios, y pasó un brazo alrededor de los hombros de su amigo de la infancia para abrazarlo más

—¿Mejor?.- le preguntó sin mirarlo

—Si, gracias amigo...- Thuban sonrió un poco adormilado

James sintió las mejillas arder pero no respondió...

𝕋𝕙𝕦𝕓𝕒𝕟 (Dramione)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora