[GAY] Mr. Imperfecto

1

"¿Cuándo piensas traer a una chica a casa?"

Detuvo el tenedor a mitad del camino hacia su boca cuando su madre habló. Su hermana mayor estaba a la mesa junto con su esposo, su hermano menor estaba sentado al final de la mesa junto a su novia. Ella no había podido haberse referido a nadie más, a menos que ella estuviera preguntándole a su nieto de 2 años.  

No tenía que levantar la cabeza de su plato para ver que todos los ojos estaban en él. Pero si no lo hacía, si se quedaba callado, su madre le daría un sermón enfrente de todos los presentes, como usualmente lo hacía. Así que lo hizo. La miró directamente a los ojos antes de encogerse de hombros, poniendo una suave sonrisa en el rostro. 

"No lo sé, mamá. Tal vez cuando encuentre a la indicada."

Ella arrugó el rostro, molesta con su respuesta. Le pasó una bandeja con pan a su padre y sacudió la cabeza con cansancio. "Tienes veintiséis años, Mason. ¿Qué tanto piensas esperar por la indicada?" Su rostro mostraba toda su desaprobación hacia su pensamiento. "Tu hermana se casó a los veinticinco, tuvo a tu sobrino un año después. Incluso tu hermano menor tiene una novia." Podía ver el rostro de los demás, sentía la incomodidad de cada uno mientras su madre seguía hablando como si ellos estuvieran solos. Incluso su padre se veía cansado de escuchar su rabieta. "Quiero ver a una mujer para finales del mes." Ella le dio una dura mirada. "Y hablo en serio."

Su hermana suspiró con fuerza. "Mamá, déjalo en paz."

"Tu mantente en silencio," ella dijo antes de señalar a su hermana con el cuchillo de cortar el pan. "Deberías ser la que lo impulse a tener una relación seria, no ser su alcahueta. Tiene casi treinta, no es un niño. Puede tomar un consejo de su madre."

Su padre sacudió la cabeza, cerrando los ojos. "Silencio. Vamos a comer. Los chicos tienen que irse antes de que se haga muy tarde."

"Solo decía." Su madre exhaló. Le dio otra mirada antes de chaquear los labios. "Quiero ver a una chica, Mason. Y hablo en serio."

No dijo nada. Bajó la cabeza e hizo su mejor esfuerzo por terminar la comida, avergonzado y sintiéndose tan enfermo que pensó que iba a tirar todas sus tripas por el inodoro si ella seguía presionándolo. Para su suerte, su hermano menor comenzó a hablar sobre sus clases y lo que tendría que hacer el siguiente semestre, distrayéndola lo suficiente como para ella dejara de darle miradas durante el resto de la cena. 

No pudo escabullirse de la casa lo suficientemente rápido.

Había salido hacia la parte trasera para encender un cigarrillo cuando su hermana lo encontró. Ella lo miró fijamente con los labios apretados, brazos cruzados y una mirada llena de compasión. 

"Ahórratelo," le dijo mientras ella se acercaba. Olivia le enseñó el dedo del medio y le arrebató la caja de los cigarrillos. Mason hizo una mueca antes de dejarse caer en la banca de hierro del jardín. Olivia se sentó a su lado. "¿Qué quieres?"

"Solo quería asegurarme de que estabas bien." Ella giró el cigarrillo hacia él para lo encendiera. Después tomó una larga calada, suspirando con cansancio. "No le hagas caso. Sabes cómo se pone con esas cosas. Piensa que seguimos en los sesenta y que lo único importante en la vida es casarse y tener hijos."

Sostuvo el cigarrillo entre los labios mientras miraba al oscuro vacío del patio trasero. "Tiene razón," murmuró antes de apoyarse en sus rodillas. "Me estoy haciendo mayor. Ya debería al menos tener una relación semi-estable."

"Siempre puedes traer un chico a casa." Olivia se rió entre dientes. "Después de todo lo único que mamá quiere es verte en una relación. Pues dásela."