ℓονє αℓαям. [ϐєοмнγυи]

14

BeomGyu busco por todas las calles posibles que estén cerca de la casa de TaeHyun, pero no había rastros de él. Tenía miedo de que le haya pasado algo al salir solo a altas horas de la noche y en medio de un apagón.

Sakura no le había dicho todo, él lo sabía, TaeHyun no pudo haberse salido así nomás porque sí de su casa, tuvo que haber un motivo por el cual haya decidido salir de su casa.

Tomó su celular y marco al celular de TaeHyun.

Estuvo caminando mientras el sonido de llamada sonaba en su oreja y escuchó un un sonido peculiar.

Era el sonido del teléfono de TaeHyun.

BeomGyu quitó su teléfono de su oreja y siguió el sonido de la melodía de TaeHyun para caminar lentamente hacía este. Un poco más cerca, pudo verificar una silueta sentada en una banca abrazándose a sí mismo.

BeomGyu se fue acercando más hasta encontrar a TaeHyun sentado en una banca abrazándose a sí mismo, como había visto unos segundos antes de acercarse. BeomGyu guardó su teléfono en su bolsillo rápidamente y se acercó a este.

—¡TaeHyun! Oh, Dios... Aquí estabas, ¿por qué estás aquí desde anoche? ¿por qué no contestas las llamadas? —Dijo con preocupación, procurando que TaeHyun no este herido—. Estás frío... ¿Cuánto tiempo tienes aquí? Dios, te puedes resfriar. —Se quitó la chamarra que él tenía y se la colocó rápidamente a TaeHyun para abrigarlo—.

TaeHyun no dijo nada ni reaccionó como BeomGyu pensó que haría, eso le preocupó aún más.

—TaeHyun... Oye, ¿qué pasa? ¿por qué no me dices nada? ¿te sientes bien? —Dijo viéndole—.

—Creo que... —Dijo TaeHyun después de un largo rato—. Deberíamos alejarnos, BeomGyu... No creo... No me siento capaz de poder amarte como tú dices, no me siento capaz de estar con alguien cuando no estoy seguro de mi mismo. Mi papá tiene razón, tú en algún momento te aburrirás de mí, de insistir, de esperar... Tú das todo cuando yo no doy nada y... no mereces ese trato, BeomGyu, no sé porque sigues perdiendo tiempo conmigo sí deberías estar con alguna chica...

BeomGyu se quedó callado ante las palabras dichas por el menor. No podía creer que me estuviera diciendo eso.

—Dame tu celular. —Dijo BeomGyu—.

TaeHyun lo miró:—¿Para qué?

—Sólo dámelo.

TaeHyun hizo un puchero y sacó su celular de sus bolsillos para dárselo.

BeomGyu lo tomó y lo prendió, mostrando que Love Alarm estaba activado con un corazón.

—¿Ves este corazón, TaeHyun?

TaeHyun volteo y vió el corazón moverse, asintió.

—¿Sabes qué significa?

TaeHyun nego desinteresado.

—Significa que una persona en un tu radio de diez metros te ama. —Dijo—. Yo soy esa persona, TaeHyun. Yo te sigo amando.

TaeHyun bufó bajito ante eso. No le creía nada.

BeomGyu tomó el rostro de TaeHyun entre sus manos para hacer que lo mire.

—Estoy siendo sincero contigo, TaeHyun. —Dijo mirándolo fijamente—. Mírame, TaeHyun. —Tomó con delicadeza la extensión del rostro de TaeHyun—. Créeme cuando digo que quiero hacer las cosas bien ahora es porque lo haré o más bien, eso estoy haciendo.

TaeHyun lo miró atento. Quería creer en todo lo que BeomGyu le decía, pero no podía, al menos no del todo.

BeomGyu acarició con delicadeza las mejillas de TaeHyun y se acercó para plantar un beso en los labios del menor y después abrazarlo.