Primer amor eligeme, soy super dulce

no me creo que no llames a tu marido

Lou Cheng recogió a su papá en el aeropuerto. Lou Hongye voló desde Australia. Tiene un depósito de minas en Australia Occidental que está activo durante el verano.

No tenía equipaje, así que abordó el avión solo con su abrigo. Fue arrastrado por la fuerte nevada cuando salió del aeropuerto, lo que lo hizo sentir fresco.

Al pisar la nieve con un pie de profundidad inmediatamente se mojaba los calcetines. Lou Cheng bajó la ventanilla del coche y le pitó dos veces: “¡Papá! Aquí."

Antes de que Lou Hongye se subiera al auto, vio que la cubierta delantera de Lou Cheng se había desprendido de la pintura y que los parachoques estaban torcidos.

“¿Tu coche está averiado y todavía lo conduces?” Cerró la puerta, dio la vuelta a una manta del asiento trasero y se la envolvió con fuerza. “Tu padre te comprará un auto nuevo mañana. ¿Qué carro quieres? ¿Superdeportivo? “

El limpiaparabrisas barrió la nieve solidificada del parabrisas.

"Realmente no me gusta conducir, olvídalo". Le gustan las motocicletas, pero hay suficientes motocicletas de edición limitada en su garaje y compró todo lo que le gusta. Lou Cheng aún no tiene nuevos disfraces.

"¿Entonces qué quieres?" Lou Hongye bajó el asiento y le preguntó mientras se acostaba.

Lou Cheng pensó por un momento y dijo: "La cafetería de la escuela es demasiado fea y el té con leche sabe mal".

"Cosas pequeñas." Lou Hongye comenzó a llamar.

Lou Cheng sabía que su padre era activista. Al ver que su teléfono había llegado al director, agregó: “La cafetería de la escuela es demasiado cara. Es hora de reducir el precio”.

Lou Hongye lo miró desconcertado.

¿Cafetería? ¿Caro? ¿Qué tan caro puede ser que incluso Lou Cheng piense que es caro?

Lou Cheng condujo el auto hasta la casa. Vivía solo en el barrio al lado de la escuela. Su madre, Yue Yun, también vivía sola. Al igual que Lou Hongye, viajaba con frecuencia y estaba muy ocupada haciendo un gran negocio por su cuenta.

Cuando llegaron a casa, Yue Yun aún no había regresado y dijo por teléfono que todavía estaba en la empresa.

La familia de tres no puede cocinar. Yue Yun invitó a una tía a cocinar entre semana, pero ahora que es el Año Nuevo chino, la tía también se ha ido a casa.

Lou Cheng ordenó la cena de Nochevieja a las 4 p. m. y la entregó en la puerta a las 8 p. m. Yue Yun regresó a las 8 p. m., dejó sus cosas y Lou Cheng vio un bolso grande y pequeño de color rojo: "¿Dónde conseguiste estos dulces?"

“Un gerente del departamento de administración se casó y me dio un dulce de boda de invitación”.

Lou Cheng dijo "Oh", y quitó la cinta de la caja de dulces.

Cuando Lou Hongye lo vio, dijo: “¡Mi hijo ha retrasado los dientes de azúcar y come dulces! Come primero."

"Come uno y tus dientes no se pudrirán". No prestó atención e inmediatamente quitó el caramelo y se lo metió en la boca. Era un dulce de leche con relleno de fresa. Cuando lo mordió, el caramelo duro con sabor a leche en el exterior se partió por la mitad, permitiendo que el suave relleno fluya y se derrita lentamente en su boca.

Lou Cheng bajó la cabeza, colocó el papel de caramelo debajo de su nariz y lo olió suavemente.

El rico aroma de la leche mezclada con el aroma de fresa erosionó el sentido del olfato de Lou Cheng, y de repente recordó algo y levantó la cabeza.