Siendo cuidado cariñosa y amorosamente por su tía desde la niñez, Bell Cranel un día decidiría abandonar su hogar para cumplir su sueño: enamorarse.
La curiosidad sobre el sentimiento llamado amor causaría su rebelión e ignorando los conflictos futu...
Ola, lo subo hoy porque decidí que era mejor opción.
Realmente, si subía capítulo doble el viernes, cómo decirlo, le quitaría ese suspenso del final de este capítulo. Así que lo subo hoy para que la espera sea de aquí hasta el viernes para el próximo capítulo.
¿Si ven la foto de portada del capítulo? Fue lo más cercano que encontré a la apariencia de Bell en esta historia.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
La encontró.
.
.
.
La vista era hermosa, manteniendo una esencia majestuosa. Un extenso mar verde iluminado por los brillos dorados del atardecer.
Los mismos rayos del sol que bajaban por el horizonte extendían las sombras de más de un centenar de soldados.
Todas las miradas fueron hacia él, que se había invitado por su propia cuenta después de haber derribado la entrada.
La emoción fue imposible de contener para Bell.
-- Lamento la intromisión.
Sus labios se curvaron en una sonrisa mientras desenfundaba su <Espada Corta>, haciéndola girar un par de veces antes de sujetarla firmemente.
Observó a todos sus futuros oponentes, que lo miraban en un inicio con incredulidad que terminó por convertirse en hostilidad.
-- ¡¡Intruso!!
-- ¡¡Atacan el templo de la diosa!!
-- ¡¡No dejen que salga vivo de aquí!!
Las espadas, lanzas, hachas, dagas; todas fueron apuntadas hacia los cielos para después caer con dirección hacia Bell.
Lo estaban sentenciando.
-- Heh...
Bell mostró sus caninos, saboreando la intención asesina que desprendían sus enemigos.
"Son niveles 4 hacia abajo, sin embargo... tienen mucha experiencia"
Sintió que una corriente eléctrica erizaba su piel.
-- Vengan, luchemos hasta la muerte.
Tomó una postura de batalla, alzando el filo de su espada contra el centenar de sus oponentes.
Ese fue el inicio de la batalla.
-- ¡¡Mátenlo!!
Un semi-hobbit dirigió la carga, movilizando a todos los aventureros al ataque.
