Es difícil ocultar lo que siento... De hecho mina siempre anda insinuando lo que es obvio, tan solo verlo me pone nerviosa, ver a otras chicas cerca de el me descontrola...
¿Que puedo hacer para escapar de estos sentimientos e ilusiones absurdas?...
Pensaba uraraka mientras veía a izuku entrenar al igual que el resto de sus compañeros.
- ¿Porque estás tan distraída ochako? -pregunto el maestro aizawa con la seriedad que lo caracteriza.
- por nada, disculpe mi torpeza -nerviosa comenzó a entrenar nuevamente, todos la observaron con extrañes asiendola sentir incómoda.
No podía anteponer sus sentimientos, su deber es ayudar a sus padres y salvar a las personas que la necesiten o eso es lo que piensa ella...
Ya era hora del almuerzo, todos se encontraban comiendo y charlando de cualquier cosa.
Uraraka comía pero no dejaba de observar a izuku, el lo noto.
- ¿Que pasa uraraka? -confundido le pregunto.
- no pasa nada... Es solo que tienes un poco de arroz en tu mejilla -dijo un poco burlona.
- no lo había notado, gracias uraraka -reia junto a uraraka, limpiandose la mejilla.
Ya era hora de volver a clases, todo transcurrió normalmente todo el día.
Al acabar las clases, todos se fueron a sus respectivas habitaciones menos algunos,
Izuku y ochako se quedaron en la sala de descanso, charlaron hasta altas horas de la noche.Al día siguiente no tendrían clases, pidieron permiso y todos fueron a diferentes lugares.
- nos vemos más tarde chicos -dijeron todos al mismo tiempo.
Uraraka se fue a comprar cosas que necesitaba junto a las demás chicas, después de unas horas se separaron dividiendo.
Tenía un poco de hambre y vio un puesto de comida y sin pensarlo dos veces fue a comer algo ligero para retirarse más rápido e ir a la U.A lo antes posible ya que estaba oscureciendo.
Su sorpresa fue grande al ver a izuku y kirishima comer ramen.
- oh hola chicos -saludo con alegría.
- hola uraraka -saludaron con cordialidad a la joven.
- que casualidad encontrarlos por aquí chicos -dijo con una sonrisa.
- sip, es que nos dió hambre y como estábamos cerca de este lugar y optamos por comer aquí - dijo izuku dejando de lado su comida.
Ya habían traído la comida de uraraka, agradeció por la comida y se la comió con lentitud, al terminar todos se fueron rápidamente a sus habilidades, no sin antes ser regañados pero no le importo tanto a la pelicastaña ya que paso un tiempo cerca de izuku, el que le robó los pensamientos.
Ocho a.m, ya todos los estudiantes estaban en sus respectivas aulas, la clase A tenía un entrenamiento especial.
- chicos hoy tendrán que rescatar a las personas que contratamos, a algunos les falta mejorar -su vista se dirigió a el chico explosión y el verano invierno, con seriedad aizawa se quedó dormido en su cama portátil.
- bien chicos, ¿quien irá por el lado norte? -pregunto izuku.
- yo, bakugo, denki y sero iremos por el norte -levanto la mano kirishima.
- bien, entonces yo iré con Iida, todoroki y tokoyami por el lado sur - izuku se fue con su equipo.
El resto se dividieron entre el lado este y oeste, en el este fueron tsuyu, Momo, jiro, mina, toru y uraraka.
Por el oeste fueron mineta, koda, ojiro, Sato y shoji.
Rápidamente encontraron a las personas de entre los escombros, uraraka se quedó pensando en uno de los edificios medio destruidos.
- debo olvidar estoy sentimientos... Definitivamente -con seriedad y determinación, se levantó saliendo de su escondite.
Vio el lugar y nadie se encontraba por esos lados le pareció un poco extraño, pero no le tomo tanta importancia.
De pronto alguien se abalanzó contra ella, al abrir los ojos moto que era toga...
- uraraka, izuku será mío cueste lo que cueste -sonrio de una forma psicópata.
- claro que no, el no te pertenece -temerosa por su vida la contradijo.
Toga saco su cuchillo y se lo clava en su hombro derecho, para luego reír fuertemente de pronto...
Despierta en el lugar en el que se había escondido, definitivamente un sueño muy raro.
Aún seguía con un poco de sueño, estubo días desvelandose por pensar en deku, al cabo de unos minutos se levantó y salió del lugar a la primera persona que vio fue a izuku muy preocupado por ella.
- uraraka... ¿Dónde estabas? -con preocupación se acercó a ella y al notar su cansancio se dió la vuelta y se arrodilló, le dijo que se subiera en su espalda con timidez y vergüenza se subió a la espalda de izuku.
- gracias -solto uraraka.
- no es nada -caminaba a paso rápido.
Talvez, no quiero renunciar... Aún quiero seguir a su lado y ayudar en lo que pueda, quiero ser algo más que su amiga, y estar fingiendo que no me gusta, ya no lo soporto más, eso debe cambiar y haré que cambie...