BLESS BLUE ROSE || Mystic Messenger Fanfic

3

—V... ¿Esta era tu solución?—preguntó Jumin, mirando a su alrededor, sin entender muy bien la situación.

V, Rika, Zen, Yoosung, Jaehee y el mismísimo Jumin se encontraban en la cafetería, cada uno con su saco de dormir.

—Sí, se han quedado sin hogar, tienen que venir a dormir con nosotros así que lo mejor es repartirlos porque ninguno tenemos sitio para acoger a los 3. Y como esta noche aún no tenemos nada preparado, dormiremos todos aquí para hacerle compañía.

—V, somos cuatro casas ¿quién se quedará sin llevarse a ningún chico?-preguntó Jumin.

—Jaehee, ella siempre está estresada, no queremos darle más faena. Había pensado en hacer un ejercicio para conocernos mejor, de esa forma podremos elegir de mejor forma con quién se irá cada uno.

—¿De qué trata ese ejercicio, V?—preguntó Jaehee.

—Es un juego, explicaré su funcionamiento. Apuntaré unos roles en un papel y los repartiremos de manera aleatória. Cada uno jugará su rol. En total hay 3 roles: el rol de lobo. Como somos 9, pondremos 2 lobos. Los lobos elegirán cada noche a una persona y la matatán. Ganan si matan a todos los aldeanos. También habrá un médico, que cada noche podrá elegir a una persona que no podrá ser asesinada por los lobos. Y por último los aldeanos, que no tienen una función concreta. Yo iré guiando el juego. Cada ronda tiene dos fases, la noche, donde los lobos y el médico jugarán su rol; y el día, donde tendréis que hablar entre vosotros y elegir a una persona para eliminar. Esa persona puede ser un aldeano, un lobo o el doctor. Tendréis que elegir bien para no eliminar a los aldeanos o al médico, ya que de esa forma le daríais ventaja a los lobos. La aldea y el médico ganan cuando se eliminan todos los lobos. ¿Lo habéis entendido?

—No. Las normas de Lolol son más sencillas—dijo Yoosung.

—Bueno, lo iréis pillando mientras juguemos. De mientras, iré preparando los papeles. Que cada uno se coloque en un lugar de esta sala, para que no podáis leer el rol de otra persona.

V repartió los papeles y luego todos se sentaron formando un círculo con los ojos cerrados.

—Cae la noche, y los lobos se despiertan para matar—comenzó a narrar V.

Jay levantó la cabeza, y trató de buscar a su compañero.

—Ejem, los lobos se despiertan—repitió V. Entonces, Yoosung levantó ligeramente la cabeza y V asintió, para confirmarle que podía mirar.

Jay y Yoosung hicieron señas hasta decidir matar a Zen.

—Bien, ahora los lobos dormirán y se despertará el doctor.

Jumin levantó la cabeza. Su amigo le dio un rol importante porque sabía que sino el CEO se iba a negar a jugar.

Jumin se señaló a si mismo, y V explicó que el médico no se podía salvar a si mismo.

Finalmente decidió proteger a Jay, sin saber que éste era un lobo.

—El médico duerme. Y ahora el pueblo se despierta. Ha muerto... ¡Zen!

El actor de musicales se tumbó hacia atrás de manera dramática, simulando su muerte.

—Apuesto que Zen era médico. ¿Quién si no decidiría no salvar a los demás?

—¡Hey! Yo hubiese salvado a alguien, mocoso.

—¡Chicos! Los muertos no hablan, además, aún tengo que revelar el rol de Zen. Zen era... un aldeano corriente.

—¿Cómo que corriente? ¡Soy extremadamente hermoso y talentoso!

—Los muertos no hablan—dijo Jumin sonriente ante una situación donde Zen estaría callado durante unos minutos.

—Ahora, podéis debatir—dijo V.

—Mi primera sospecha es del señor Han. Él querría matar a Zen el primero—explicó Jaehee.

—Bien es cierto que sería muy típico de mí matar a Zen, y admito que estoy muy orgulloso de los lobos por matarlo, pero lamento deciros que yo no lo maté.

—Podría ser Jay, Hayoon o Lena, ellos son nuevos y podrían haber matado al que más les llamó la atención. Zen destaca por su belleza—pensó Rika.

—No tengo forma de defenderme, pero sí defenderé a Lena. Ella preferiría matar a Jay o a mí porque sino le hubiese sentado mal matar a otro con el que no tiene tanta confianza—defendió Hayoon a su amiga.

—Es complicado saber quién ha sido con una sola muerte... Deberíamos votar cada uno a quien quiera y ya veremos al día siguiente qué ocurre—propuso Rika.

Todos pensaron que era una buena idea, así que a la cuenta de tres señalaron a quién querían matar.