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Lo primero que Jaemin hizo al llegar a casa fue ir a su habitación, dejando no solo confundido a Donghyuk, sino también a Mark; quien se encontraba sentado a un lado del moreno, y a su madre. La cual nunca había visto actuar de aquella forma al pelinegro.

- ¿Qué le pasa? - Preguntó la mujer viendo como Donghyuk y su acompañante simplemente negaban. Dando a entender que no sabían nada en lo absoluto.

La idea de ir a la habitación de Jaemin quedó completamente descartada de su mente al ver como el chico salía de la misma forma en la que había entrado pero; está vez, su madre se le pusó en frente al ver que iba a salir por la puerta principal de la casa

- ¿A dónde crees que vas jovencito?

- Necesito más ropa - aclaró e intentó rodear a su madre pero ella volvió a impedirle el paso.

- ¿Con el permiso y dinero de quién irás a comprarla? - Le preguntó seriamente cruzándose de brazos.

- Yo tengo dinero y... mamá, ¿sabías que eres la persona a la que más amo en este mundo?

- Creí que a la persona que más amabas en este mundo era Renjun - dijo Mark y Jaemin cerró los ojos mientras hacia sus manos en puños, la madre del azabache miró al chico que acababa de hablar y se sentó en el sofá de enfrente.

- Mark, me agradas mucho, ¿sabes?

- ¿Qué quiere saber sobre Renjun señora? - Preguntó Mark, entendiendo a lo que la señora quería llegar.

- ¿Cómo es su personalidad? ¿Qué le gusta? Dime lo que puedas.

- Mamá...

- Cállate, Jaemin. Quiero saber sobre la persona que me ha quitado el primer lugar en tu corazón - dijo haciendo algo de drama y el pelinegro tuvo ganas de golpearse con algo.

- Bueno, Renjun tiene buenas calificaciones, llega a preocuparse por las personas que enserio le importan, puede tener una personalidad un poco infantil en algunas ocasiones pero nunca la ha mostrado frente a Jaemin porque lo considera algo molesto a veces - dijo burlón y el azabache le dio un golpe en la cabeza antes de sentarse junto a su madre - Su hijo incluso ha logrado fastidiar un poco al pobre de Sungchan por hablarle siempre de Renjun. Es... como si él fuera la única persona que existe para él.

- Se hace el difícil, ¿eh? Me agrada el chico y eso que todavía no lo conozco personalmente - confesó la mujer y fue ahí cuando Jaemin pasó una mano por su nuca.

- Mejor dicho, lo hacía - confesó y los chicos frente a él fueron los que sentían más curiosidad al respecto.

- ¿Qué quieres decir con eso? - Preguntó esta vez Donghyuk y el azabache humedeció sus labios.

- Tendré una cita con Renjun y... por eso quiero verme bien para el viernes -confesó.

- Y... ¿ya tienes pensado el lugar al que vas a llevarlo? - Volvió a preguntar el de piel morena y Jaemin negó - ¿Por qué no lo llevas al teatro Chongdong? Ya sabes, él está en clases de teatro, que su primera cita sea en uno posiblemente le guste mucho.

- Podría ser, quizá tenga más puntos a mi favor - aclaró, tratando de no emocionarse frente a los otros dos chicos y su madre.




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No tenía mucho que las clases habían terminado, Renjun observaba una y otra vez las hojas que le habían entregado. Le faltaba muy poco para aprenderse la parte que actuaría; en las audiciones de la obra, que no se dio cuenta que Jeno se ponía al lado de él con las manos dentro de los bolsillos del pantalón.

- ¿Ensayando? - Preguntó y el chino se sobresaltó un poco por verlo. El de alta estatura rio. Pensaba que; hasta para saltar un poco del susto, Renjun se veía lindo y el chino solo hizo una mueca por no ver a Jeno caminar a su lado, dándose cuenta que prefería un poco cuando Jaemin llegaba a "molestarlo".

Porque él siempre decía su nombre y hacía que lo mirará directo a los ojos en cuanto lo tenía en frente.

- Lamento no darme cuenta que estabas aquí - confesó y se detuvo frente a su casillero - Y sí, quiero actuar bien, hacerla de Romeo es algo que enserio me interesa.

- Ya veo - Jeno humedeció sus labios mientras veía a Renjun meter y sacar cosas de su casillero. Aclaró un poco su garganta y, por instinto, el chino volteó a verlo.

- ¿Pasa algo?

- No, me estaba preguntando - se que era un poco difícil decirlo pero se acercó un poco al otro, agarró una de sus manos y suspiró para no ponerse más nervioso - A ti, ¿te gustaría salir conmigo el viernes por la noche?

- ¿Salir contigo? - Repitió Renjun, aquello realmente no se lo esperaba. Aunque no lo dijera, seguía sin creer que para ese mismo día; que Jeno quería salir con él, que tendria una cita con Na Jaemin.

Quien; por el momento, no lo había estado siguiendo en todo el día.

- Entonces... ¿aceptas? - Preguntó Jeno algo impaciente y Renjun soltó la mano de la del chico frente a él.

- Jeno, enserio me pareces alguien lindo pero... ya tengo planes ese día con alguien más y la verdad quiero estar con él - aclaró. Cerró su casillero e hizo una reverencia para después salir del edificio. Estaba cerca de doblar en una de las esquinas, pero escuchar que Jaemin gritaba su nombre hizo que volteará a verlo sin pensarlo demasiado

- Oh Dios, mírate, estás todo sudado y... ¡No! Ni se te ocurra tocarme estando así - le advirtió al pelinegro; al ver que su intención era abrazarlo, y éste rio un poco.

- Lo siento - acomodó su mochila sobre su hombro y alborotó su cabello - ¿Ya vas a tu casa?

- Sí, la mayor parte del tiempo voy a casa después de clases - bromeó y Jaemin paso una mano por su nuca. - Quieres preguntarme algo, ¿estoy en lo cierto?

- ¿Es tan obvio?

- Algo... sí, mucho - Renjun se cruzó de brazos y, con una leve sonrisa, espero a que Jaemin le preguntara. - Bien, te escucho.

- ¿Puedo acompañarte a tu casa? Es decir, si te acompaño se me hará más fácil irte a buscar el viernes. Además, así estaré seguro que llegaste bien y que no te pasó absolutamente nada malo -respondió y el chino lo pensó por unos segundos, sonriendo ampliamente por la idea que Jaemin le dijo.

- Está bien, puedes hacerlo, Jaemin. Quizá tu compañía me sea de agrado en el camino y, posiblemente, te pida que vuelvas a acompañarme.

I LOVE YOU ☆Jaeren☆Donde viven las historias. Descúbrelo ahora