En medio de esto, Naen estaba haciendo fielmente lo que Astelle le había pedido.
Astelle miró a Naen así y cayó en sus pensamientos.
¿Hará esta chica lo que Florin le dice esta vez también?
Florin debe estar tratando de usar a esta chica otra vez.
Después de verla a su lado todo este tiempo, Astelle sabía que Naen no era idiota.
Era un poco tímida y obtusa, pero hizo exactamente lo que le dijeron.
No parecía tan estúpida como para no saber que Florin la utilizaba.
'Aún así, ella es su familia'.
Una niña noble impotente no puede escapar de la sombra de su familia.
Esto se debe a que si su familia cae, su propio destino también caerá al abismo.
En el pasado, la propia Astelle era así.
Florin hará que esta chica haga otro trabajo peligroso.
Si las cosas salen mal, cubrirá sus pecados una y otra vez.
Cuando se enteró de la nota, Astelle había pensado en averiguar los planes de Florin por adelantado y tenderles una trampa a ambas hermanas.
Sin embargo, ver a Naen, que aún no era un adulto, la molestó un poco.
"Señorita Naen".
Naen, que sostenía un bolígrafo y escribía con fuerza, levantó la cabeza.
"¿Si su Majestad?"
"¿Quieres volver a la mansión?"
"¿Le ruego que me disculpe?"
Naen parpadeó con sus grandes ojos avergonzada.
"¿Q-qué quieres decir......?"
"Te pregunto porque creo que extrañarás a tu familia en la mansión. En tu mansión deben estar ahora Lady Florin y tu padre, el marqués."
Naen dudó por un momento ante la pregunta directa de Astelle, y luego logró responder.
"Yo, extraño la mansión, pero me gusta vivir aquí".
"¿Es eso así? ¿No es difícil trabajar?
"N-no".
Astelle miró directamente a Naen y habló con voz tranquila.
"Señorita Naen. Al principio te traje aquí para un castigo formal".
Naen la miró con una mirada de sorpresa.
Después de que la emperatriz la trajera aquí, siguió llamándola al trabajo, pero esta era la primera vez que mencionaba el tema del castigo de manera tan directa.
"Estoy seguro de que lo sabes, pero incluso si fue un error, fue algo que no podía pasarse por alto".
"Sí......"
"Pero como la señorita Naen aún no es adulta, y pensé que te sacrificaste por preocupación por tu familia, decidí terminar aquí".
El rostro de Naen palideció cuando salieron las palabras: 'Ella se sacrificó por preocupación por su familia'.
Era como si la emperatriz la estuviera pellizcando abiertamente porque la habían pillado siguiendo las órdenes de su hermana y mintiendo.
Aunque me alegro de que te guste vivir aquí. La señorita Naen es muy sincera y diligente, así que también me agradas. Si te parece bien, espero que también me ayudes aquí en el futuro", continuó Astelle, tranquilizándola.
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Cómo esconder al Hijo del Emperador
Teen Fiction"De todos modos, nunca me amaste, ¿verdad?" La tan esperada vida matrimonial de Astelle terminó en tan solo un día. Trabajó muy duro para convertirse en la esposa de Kaizen desde los diez años, pero lo único que le quedó fue el estigma de emperatriz...