"Sin créditos para Louis"

Capítulo 5 "Solo estamos actuando"

Hay una versión de Louis que se sintió nerviosa hasta comerse las uñas, con el corazón abrumado y las ansias carcomiendo su alma, una fuerza ajena que lo impulsaba a correr lejos y escapar de sus sentimientos por su mejor amigo, pero estaba esta otra parte, una más dócil y soñadora, la parte que había enterrado en lo profundo de su alma para que jamás saliera...la versión de sí mismo enamorado.

Aquella fuerza era mucho más grande, quizá por eso dicen que el amor es la fuerza más poderosa, porque es el amor el que mueve lo inamovible y engrandece los corazones, es el amor lo que vuelve indestructibles a los humanos.

¿O será la parte más tonta, aquella que nos rompe el corazón dejándonos ilusionarnos con un imposible?

Como sea, es esta versión, la que hace que el corazón de Louis se agite por dentro con las emociones recorriendo su cuerpo, la que permite el aleteo de las mariposas en su estómago, la misma que le hace olvidarse del miedo con solo mirar los ojos de Harry.

—Hey... ¿te sientes bien?

—No. Sí...no lo sé.

—Entiendo, humm escucha cariño, si esto no se siente bien, puedes...podemos, el contrato no es—Harry titubeó cuando vio el rostro de su amigo —no quiero obligarte a hacerlo si tú no quier-

Louis parecía agobiado y necesitaba contenerlo, ¿en qué momento se le ocurrió que esto estaría bien? Quizás Louis lo encontraba incómodo y hasta repugnante, Harry lo había visto acompañado por chicas durante los últimos años, pero sabía que no era homofóbico, así que no era eso lo que lo acongojaba... algo no le estaba diciendo.

—Cállate Edward— masculló Louis mientras frotaba sus manos una sobre la otra con evidente nerviosismo— estoy bien.

—Bebé...—la voz del actor tenía ese tinte apacible pero la verdad es que su corazón estaba frenético—habla conmigo cariño...

Harry se acercó y el aroma de su perfume golpeó el olfato de Louis, en cuanto sus fosas nasales entraron en contacto con el perfume que reposaba en la piel de su cuello, dejó caer su cabeza sobre el pecho ajeno, su cabello rozando la camisa fina del actor y solo negó porque ¿qué podría decir? Harry sería su más grande amor, aun cuando los años pasaran y cada palabra se ahogara entre los suspiros y las noches de desvelo pensando en él.

—Estoy bien mi Sol —soltó aquello sin poder detenerlo —¿tú?

Una caricia, eso eran las palabras de Louis cuando le hablaba de esa manera, no solo era el sobrenombre, era la forma en cómo le hablaba, era su manera de preocuparse por su bienestar siempre.

—No quiero incomodarte, si esto es demasiado yo pued-

—No. —resolvió sin vacilación. Había tantas cosas que no estaba diciendo y su garganta dolía de tanto tragarse su amor —Solo, s-solo promete que nada va a cambiar entre nosotros después de esto.

En algún punto, su loca mente pensó que, quizás esta era la oportunidad que tendría para confesar su amor, si Louis respondía como él esperaba, Harry llegó a pensar que esto podría ser mutuo ¡estúpido! Se dice a sí mismo cuando siente la congoja de su mejor amigo.

Con el pavor recorriéndole, Harry hizo una pausa, el tiempo suficiente para tragarse el nudo que se apretaba más en su garganta y sus ojos ardían amenazantes con comenzar a lagrimear, esa tonta y fugaz esperanza se desvanece cuando tocó las manos de Louis y están frías y pudo sentir su temblor.

—Te lo prometo, seguiremos exactamente igual, nada, absolutamente nada cambiará.

Aquellas palabras fueron muy duras, una de las pocas veces que Harry habló tan de prisa, como si quisiera deshacerse de ellas porque envenenaban su alma.