"Sin créditos para Louis"

Capítulo 17 "Confesiones entre sueños"

Dedicado a @GARRA_N y @PauiinaAriceaga, feliz cumpleaños cariño!

—Lou... ¿Sabes por qué Amelia no me gusta?

—No.

—Porque soy gay.

Hubo un golpe seco en su pecho con esas  palabras, parecían simples pero definitivamente eran efectivas. No solo eso, pronunciadas por Harry se volvían detonadoras, radicales y libertadoras.

 Harry, el chico del que había estado enamorado desde hace cinco años ¿gay?

Todo su mundo se tambaleó de repente entre esas cuatro paredes sin que nadie lo pudiera evitar, siendo ellos los únicos testigos de aquella frase que estaba hondeando frente a él como una estela.

—¡¿Qué?! —Louis intentó separarse para mirarlo aún entre la oscuridad, pero no pudo.

—Shh duerme Lou.

—Harry, —el impacto de esa declaración hizo que su estómago se hundiera, como si el peso del mundo de repente reposara sobre esa área de su cuerpo, sintiendo los estragos de una verdad que cambiaba todo —¿Qué dices?

Harry se acurrucó más cerca, tenía los ojos cerrados pero su cuerpo entero buscaba entre sueños y realidades la fuente de su aroma favorito, el aroma a amor. Su nariz olisqueó hasta dar con el cuello de Louis mientras éste sentía que su corazón explotaba por dentro.

Aquellas palabras entraron por sus oídos, pero no se quedaron ahí, corrieron a través de todo su torrente sanguíneo de forma salvaje e incontrolable, despertando cada sentido y todo el sistema del castañito estaba alerta.

—¿Dónde están Lohue? —dijo, como si lo que acababa de confesar no fuera el secreto de su vida ¿acaso Louis fue el único que nunca se dio cuenta? Harry estaba a medio dormir pero lucía relajado, como si aquello hubiera sido una decisión que tomó hace tiempo y no algo que se coló en el momento. Giró su rostro hasta chocar con el de Louis y entonces habló —Rob me dio el besito que me dejaste —suspiró— y dijo que...que si quería más viniera hoy. Quiero más Lou, quiero otro besito por favor.

¿Besito? ¿Qué habría hecho Rob? Louis no lo sabía, pero su corazón se derretía al ver a aquel hombre de 1.85 m buscando un besito, entre sábanas retorcidas y la oscura complicidad de la noche.

Aquello parecía una fantasía cruel al despertar porque ya había pasado antes. Harry cambió de posición y aquello le permitió ver sus ojos, por una fracción de segundo Harry lo miró como siempre había querido que lo mirara y entonces entendió lo que era sentirse amado.

Cerró sus ojos verdes de nuevo mientras esperaba. El fantasma de sus labios apenas unas horas atrás no se iba y Harry juró que jamás se desharía de él, porque si aquello era todo lo que podía tener, se aferraría a esos recuerdos y aún pasados los años, le acompañaría hasta el final, sin embargo su cuerpo entero seguía en espera ante Louis.

—¿Dónde lo quieres? —se aventuró a responder, ni siquiera supo de dónde salió esa repentina valentía pero lo dijo, y no se arrepintió.

—Donde nadie me ha besado antes.

Harry levantó su rostro por apenas dos segundos, su nariz rozaba con la de Louis, podía sentir el golpe del aliento del contrario sobre sus mejillas, pero eso no impidió romper la distancia.

Con el corazón latiendo a más no poder se acercó a su boca, observó la silueta oscura de Harry a través de los destellos de la noche, como un sueño. Era precioso.

Sus ojos estaban cerrados y sus labios entre abiertos, la respiración cesaba en su ritmo y poco a poco se volvía relajada, la luz de la luna se colaba por las rendijas de la ventana, el aire frío permeaba el clima de Londres, pero dentro de aquella habitación, la primavera había llegado.