Lonely Heart [ Cinco Hargreeves || The Umbrella Academy]

C E R O

La primera bebé adoptada, Emily Hargreeves.

Japón, 1989.

“ —El inesperado nacimiento de una bebé en la estación del metro de la capital nos sigue consternando a todos.
Está mañana una joven de aparentemente veintidós años dió a luz en vía pública, lamentablemente la chica fallecido después del parto.
La familia de la chica sigue sin dar alguna declaración de este extraño caso...”

—¡Yo no quiero a esa niña! ¡Es un FENÓMENO!, ¡UN MONSTRUO!.

—Señora por favor no grite— el Doctor la regaño.—y no diga eso, esa niña es su nieta.

—No, se equivoca. Esa cosa— señaló a la recién nacida a través del cristal.—no es nada mío, es un fenómeno que mató a mi hija— su mirada oscura se clavo en la bebe quien comenzaba a moverse bajo su manta.

En el pasillo donde se encontraba la sala de recién nacidos el Doctor quien había atendió el parto de Alice la joven que había dado a luz en el metro está mañana y que ahora era noticia internacional trataba de hablar con la madre de la joven, buscaba la manera de convencerla de que se llevará a la bebé con ella.

—¿Entonces que pretende que haga con la bebé?— pregunto él hombre de bata blanca.

—Lo que se le de la gana, no me importa sólo no la quiero conmigo ¿qué tal si es un demonio o algo peor?.

—¿Cómo se le ocurre decir eso?.

Mientras la discusión entre ambos adultos seguía un hombre bien parecido caminaba hacia ellos, sin llamar mucho la atención se detuvo frente al cristal donde estaban los recién nacidos y miro a la pequeña que era causante de la discusión.

—Fascinante— hablo el hombre llamando la atención de los otros dos adultos quienes detuvieron su conversión y lo miraron.—¿cuánto quiere por la niña?.

—¿Perdón?— dijo el Doctor.

—¿Cuánto dinero quiere por esa niña?— repitió su pregunta mientras se giraba a ver a la mujer.

La mujer de ojos cafes miro con asombro al hombre frente a ella.

—¿Quién es usted?—. fue lo único que atinó a preguntar la mujer un poco desconcertada..

—Soy Reginald, Reginald Hargreeves y estoy interesado en adoptar a "su nieta"— hizo comillas con los dedos en las últimas palabras.

Tanto el Doctor como la señora parecieron sorprenderse más ante las palabras del hombre.

—¿En verdad la quiere?— pregunto la mujer.

—Por supuesto— respondió  Reginald.

—Entonces es toda suya, llevesela.

—¡Señora!— exclamó el Doctor sorprendido.

—Yo no quiero tener nada que ver con esa cosa, llevesela lo más lejos que pueda y haga lo que quiera con ella— dijo con frialdad mientras mirada con repulsión a la bebé.

Reginald sonrió con orgullo mientras que sus ojos se llenaban de un destello peculiar, aquella niña era la primera que logró  "adoptar" y había sido más fácil de lo que había pensado.

. . .

—De ahora en adelante serás Número Cero— hablo de manera baja el hombre mientras caminaba hacia las fueras del hospital donde un automóvil negro lo estaba esperando.