-First meet- (MitsuTai)-TOKYO REVENGERS

Decimoprimer contacto- "Fiebre"

Lo que debía ser una mañana tranquila en la que iría a la escuela como habitualmente, se convirtió en una incómoda situación en la que no estaba en sus cinco sentidos y se encontraba confundido sobre las decisiones que debía tomar.

Le pareció haber escuchado mal, por una parte deseaba no haber atendido ese molesto teléfono que casi le parte la cabeza con apenas un pitido, pero del otro quería decirle que si, él no esa de esa forma, no tenía sentido. Sus palabras comenzaron a sonar fuera de lo habitual.

"mgh...maldita sea, no" -tambaleante, rechinando los dientes- "no necesito...tu ayuda" -su respiración comenzaba a agitarse, mala señal-

"!!!" -no le costó notar dicha anomalía luego de guardar un breve silencio- "Taiju, ¿estas bien? en serio, suenas..." -paró un momento por la fuerte toz que venía del otro lado- "por favor, dime dónde está tu casa" -notablemente nervioso-

"...ugh..." -apenas podía pensar y mantener los ojos abiertos, le resultaba tan vergonzoso de solo pensarlo, solo que eran mas que pensamientos- "no...quiero que me veas así" -bajando un poco el tono-

" ¡ah?"-parpadeó varias veces seguidas, intentando asimilar lo que había escuchado, definitivamente la fiebre le estaba haciendo mal porque él nunca diría algo como eso, aun así no dejaría pasar la oportunidad- "no importa, solo dímelo" -elevando un poco la voz- "estoy seguro de que estas solo en casa, necesitas ayuda"

"jm...no me ...pongas a tu nivel" -intentando estabilizar su respiración- "soy fuerte, puedo lidiar con...esto sin problemas idiota" -justo cuando iba a reír, un fuerte estruendo alertó a su interlocutor-

"TAIJU!?" -gritó alterado- "¿ESTÁS BIEN? ¿QUÉ PASÓ? RESPONDE"

-otro ruido sonó, mas suave y cerca del teléfono- "...ugh...estoy"- gruñó, al parecer se había caído por casi un desmayo, su respiración se agitó nuevamente- "yo no...mgh..." -un prolongado gruñido volvió a alertar al contrario, hasta que recibió una respuesta- "...el...konbini..."

"¿tai-" -confundido- "¿konbini? Taiju, no tengo tiempo para eso, dime en dónde está" -no podía aguantar mas la desesperación, no dejaba de apretar fuertemente el teléfono-

"...cerca del konbini..." -recuperando el aire- "...mgh...en la calle xxxxxx" -se notaba molesto, lo último que quería era quedar como un chico débil y pedir ayuda, pero ya no podía soportarlo, si tenía que soportar ese calvario hasta el atardecer en soledad, enloquecería- "...pero...no digas nada"

-asintió, aunque no es como si pudiera verlo- "estaré ahí lo mas rápido que pueda, por favor, espera" -se calló un momento y luego se despidió- "nos vemos" -colgó sin esperar una respuesta y corrió hacia su habitación a buscar un bolso y algunas cosas que pudieran llegar a servirle. Sus hermanas no estaban en casa y su madre trabajaba así que no sería un inconveniente. Se puso unas zapatillas cómodas y luego partió, cerrando con llave detrás suyo.

Por su parte, el mayor de los Shiba estaba molesto por haber sido dejado con la palabra en la boca, luego estuvo luchando por ponerse de pie sin mucho éxito; se dejó caer completamente, apoyando las manos en el suelo con los brazos extendidos y la cabeza mirando hacia abajo, no paraba de respirar aceleradamente, sudar y temblar, era horrible. 

Ahora no podía dejar de pensar en lo recien sucedido, lo vergonzoso que había sido ceder ante su lado mas débil y pedir ayuda indirectamente, la fiebre lo convertía en otra persona. Se arrastró un poco, tanteando los lados hasta llegar a la isla de la cocina en donde se apoyó para intentar recuperar la postura y el equilibrio.