—... Lo siento...
Millie ladeó la cabeza, jugueteando con las yemas de los dedos. Ahora que Chris, el CEO de Valentine's, se enteró de que era un omega, Millie pensó que justo en ese momento, sería su primer y último día para estar tan cerca de Chris.
Chris despegó lentamente los labios, observando su tímida expresión.
— Señor Millie.
—Sí, CEO.
—Incluso si lo aparento, soy una persona a la que no le gustan las relaciones que no son consensuales.
Era una voz tranquila e inusual para una persona que había, hasta hace un momento, introducido su pene hasta la raíz de la boca de Millie. No estaba equivocado. Evidentemente, Chris le ofreció una opción, y fue el propio Millie quien eligió recibir lo que él llamaba un "castigo".
Millie movió su pequeña manzana de adán que parecía estorbar y pasó la saliva pegajosa de su boca detrás de su garganta debido a la tensión.
—¿Qué debo hacer?
Chris golpeó el sofá de cuero con la punta de los dedos como si estuviera pensando en algo.
—De acuerdo con las reglas, lo correcto sería el despido. La política de la empresa dice que sólo contrato a betas porque no me gustan otros alfas o feromonas omega.
"¿El propio Chris no era un alfa dominante?" Millie, incapaz de dirigirle esas palabras, se limitó a cerrar la boca e inclinar la cabeza de nuevo.
—Pero... Tu feromona es increíble.
—¿Qué?
No le molestaba. Estaba seguro de haber oído eso, sin embargo, los labios de Chris estaban fuertemente cerrados.
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El sumiso.
Teen FictionCuando pasó por el momento más difícil y perdió a su familia. Recibió un pequeño favor de Chris, el CEO de Valentine's. Milie se enamoró de él. Así que se unió a la empresa para conocerlo. Pero, hay un secreto que no debe ser descubierto por nadie...