Capítulo 5: "Jeffrey Gray"

6 0 0
                                    

La puerta se abrió y un tipo un poco más alto que yo y de tez morena estaba parado frente a mis ojos

-Mansión Gray. -los fulminó con la mirada.

-Estamos aquí por un tema confidencial. -traté de mirar por detrás de él cuando miró a Marcus

-¿Qué tipo de tema? -entrecerró sus ojos.

-Tenemos información sobre Luke...y su novia. -dijo Marcus

-Lo siento, no tenemos información de visita. -dijo sacándose la mano de un tipo de audífono que tenía en su oído.

-Per...

Y el hijo de puta cerró la puerta en mi cara, me la quedé mirando respirando rápidamente, mi puño se dirigía a la puerta cuando Mike lo tomó de atrás, ya no soportaba más esto, la quería, quería a mi Evangelina. Mi celular comenzó a sonar y atendí mientras bajabamos por las escaleras.

-¿Qué mierda quieres Paul? -gruñí.

-Tengo la información. Se llama Jeffrey Gray el dueño de la mansión, y trabaja junto con su hermano Jackey, pídeles entrar queriendo hablar con ell...-lo interrumpí.

-No me dejaron entrar, esos imbéciles no me dejaron. -grité y José me advirtió que me calme.

-Butler cálmate. Estoy seguro que Evangelina igual no está aquí, habría más seguridad al respecto.

Seguí de largo ignorando a José y corté el teléfono, los chicos se quedaron hablando con gente que estaba en la planta baja y localicé a alguien fumando en el jardín. Me aseguré que nadie me vea y lo tomé por el cuello tirando su cigarrillo y pisándolo.

-¡Suéltame! ¿Qué mierda te pasa, amigo? -abrió sus ojos

-Te daré segundos para que me pases el número de Jack.

-¿De Jack? ¿Todo por el número del portero? -respiraba agitado cuando lo solté violentamente.

-Te di segundos, tú no sabes con quien estás hablando, dámelo ahora. -gruñí


Eva POV's

Intenté abrir mis ojos y veía como todo daba vueltas. Pestañé rápidamente y todo comenzó a acomodarse en frente mío...me di cuenta que no estaba en el mismo lugar que antes, pero era igual de horrible que el anterior. El olor a humedad envolvía el ambiente haciéndome arrugar la nariz. Había unas galletas en un plato sucio y un poco de leche en un vaso que estaba con los bordes rotos, ¿Era una broma? ¿En serio? Miré a mi izquierda y había una bolsa con hielo, la tomé rápidamente y la puse en mi cabeza con la única mano que tenía suelta, ese estúpido casi me mata. La voz de Miller era lo único que seguía en mi cabeza para no rendirme. De repente me acordé de algunas cosas, mientras estaba inconsciente, unas voces diciendo que Miller tenía 36 horas para encontrarme, eran dos voces gruesas hablando, y que él supuestamente había robado una joya llamada, La Joya Surinam. Negué con mi cabeza ante el recuerdo... ¿De qué hablaban? Eso no podía ser cierto.

Unos gritos de afuera me hicieron salir de mis pensamientos y escuché unos pasos que se dirigían a la puerta que apenas podía visualizar en frente mío por la falta de luz. Inmediatamente me encogí en mi lugar y la puerta se abrió, revelando a un chico de unos veintiséis o veintisiete años...

-Hola cariño. -me sonrió lascivamente y mi cuerpo comenzó a temblar.

- ¿Quién eres tú para decirme cariño? -escupí enojada.

Comenzó a pasearse por la habitación y colocó una silla frente a mi cuerpo.

-Jeffrey Grey, amor. Ese soy yo, tu peor pesadilla. -Rio provocando un eco en la habitación.

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Apr 21, 2016 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

36 horasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora