ALUCINEMOS

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Ya no es lo mismo, desde ese 22 de agosto han cambiado mucho las cosas, somos auténticos desconocidos con muchas cosas en común. Me mira, nos miramos. Cruzamos las miradas y de repente nos retiramos. Tenemos miedo, miedo a caer y volvernos a tener. Pero, lo quiero; lo he perdido. Permanecemos en el mismo instituto. Diferentes cursos, mismos amigos. Es como ser pareja divorciada y tener el mismo trabajo. Nos tenemos que aguantar, es lo que hay. Yo no quiero perder a mis amigos por culpa de una mal pasada y supongo que él tampoco. Pero lo que yo no entiendo son cosas tan tan irreales de comprender... hace días empezé a hablar con un chico, no quiero nada ahora mismo pero necesito distraerme y siento decir que alomejor se está emocionando creyéndose una vida conmigo, pero siento decir que es solo un capítulo corto ¡¡O eso creo!! Hizó una cosa muy rara de comprender, le habló diciéndole que no se acercase a mí. ¿Pero, de qué va? Tiene celos de que me vaya con otro, de que esté mejor sin él. Tiene miedo de perderme.....

Difícil adolescenciaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora