"Just Us..." © [PJM & MYG] +18

Capítulo 16.

Jimin tiembla mientras siente como su chico disfruta de él.

Este tiene que enterrar su rostro en la almohada para evitar que Yoongi lo vea llorar pero un sollozo se le escapa.

No podía arruinar ese momento íntimo con sus cosas.

Pero Yoongi termina dándose cuenta de aquello. Min poco a poco deja de mover sus caderas bajando el ritmo de sus estocadas hasta finalmente detenerse y poco a poco sale de él. — Jimin... ¿Estás llorando? — Pregunta y se siente estúpido pues obviamente lo estaba haciendo.

El pelirosa niega con su cabeza e intenta disimularlo pero le es casi imposible. Este se sienta, haciendo una mueca por el leve dolor en su trasero pero no es nada grave. Estaba acostumbrado a aquello.

Ambos habían decidido tener intimidad por primera vez desde que su princesa no estaba ahí con ellos, pese a que una de las reglas de la relación era intentar incluir siempre a los 3 en los encuentros... Ambos habían sentido la necesidad de hacerlo, como una manera de consolarse mutuamente. De intentar sobrellevar la carga de no poder encontrar a Han por ningún lado. — Estoy bien, Yoongi... Lamento sí eche a perder el momento. —

— No te disculpes, igual no estaba tan de ánimos como creí. — Dice suave mientras se sienta al borde de la cama. — ¿Estás así por ella? —Pregunta.

— Es que... La extraño tanto, Hyung. — Dice este. — Ella y tu son mi vida. Sin alguno de ustedes... No puedo seguir. —

— Yo también. — Admite Yoongi. — Dios... Me siento tan inútil. — Gruñe molesto consigo mismo.

Habían pasado ya demasiado tiempo y el no poder dar con ella era algo realmente frustrante. Aunque de pronto algo se le ocurre al mayor. — Jimin... ¿Te duele mucho el culo? — Pregunta de pronto.

Jimin frente el entrecejo haciendo una ligera pausa. —... No. —

— Vistete. Tenemos que trabajo que hacer. —

(Flashback, Hace 5 años)

Un mes después de huir, el trío se encontraba viviendo en un cuarto de azotea. Yoongi y Jimin habían robado  a un par de personas y habían conseguido lo suficiente para alquilar aquel cuartucho. Han había enfermado debido a que el invierno se acercaba. Jimin se encontraba arropandola para que no empeorara... No sabían lo frágil que podía ser su salud bajo condiciones extremas. En el lugar apenas y tenían un colchón y lo necesario para vivir.

— Mi amor... Descuida. — Estornudó. — Ven, Yoongi no debe tardar..— Susurró y abrió sus brazos para que él también pudiese arroparse.

Jimin fue abrazado por la chica sintiendo su calor. Yoongi no tardo en llegar con la cena. Estaba feliz porque había conseguido algo decente para cenar, sabía que las cosas estaban mal pero ambos debían esforzarse por mejorar su vida y darle todo a su reina, su Han.

— Yoongi, Amor... — Sonrió ella débilmente. — Ven... — Pidió mientras abrazaba y mimaba a Jimin.

El mayor obedecio con una sonrisa adornando su palido pero bello rostro. Camino hacia la menor dejando primeramente  la bolsa de comida china que traia e ir hacia los brazos de su pequeña Han.

Ella los recibió a ambos. Entre los 3 se daban calor.

Jimin le dió un beso a Yoongi.

Han volvió a estornudar, estaba cada vez peor. Y eso preocupaba a el pelirosado.

— Chicos, Empiecen a comer. — Dijo Han un poco débil. Yoongi la miró, No lucía bien pues se encontraba más pálida de lo normal y con terribles ojeras, su nariz estaba Roja y no dejaba de estornudar. Debían llevarla al doctor pero era bastante riesgoso, ella tenía mucho escalofrío.

Jimin puso agua a calentar para hacerle un té.

— Deberíamos llevarla al hospital, se ve terrible. — Hablo el pelirosado.

— Lo sé, Pero acabamos de pagar la renta y comprar la comida de la semana... Eso nos dejó sin dinero. — Dijo Yoongi serio. — Han siempre ha sido muy propensa a enfermarse. —

Jimin pone el agua caliente sobre una taza y deja una bolsita de té en ella.

Han se levantó con cuidado del colchón para ir hacia ellos. Aun arropada con la manta se sienta en el piso.

— Pero debemos llevarla...— Exclamo Park.

— Sí no hay dinero no creo que deban gastar en mi. — Dice ella. — Me siento mal porque soy la única que no puede aportar dinero de los 3... Encima soy una carga. Ni siquiera he podido atenderlos como se merecen. —

Los primeros días fuera del psiquiátrico habían sido difíciles. Han había tenido un gran trauma después de aquel abuso y había sido muy difícil el poder sobrevivir sin dinero o algo estable.

Habían Estado en constante movimiento para evitar que los atraparan. Cometiendo crímenes de todo tipo hasta finalmente poder hacerse de algo. Y en el transcurso de estás semanas se habían dedicado a hacerla olvidar cualquier mal rato por medio del sexo. Hacer tríos y todo tipo de prácticas sexuales entre ellos era lo que estaba fortaleciendo su vínculo. Hasta que finalmente cayó en muy mal Estado.

Yoongi suspiró. — Tienes razón... Haremos algo... — Dijo Yoongi. — Tu y yo buscaremos algo para empezar a trabajar esta noche, nos pagaran bien y podremos llevarla al doctor. —

El pelirosado asintió.

La cena es silenciosa y más tarde Han cae rendida sobre el colchón. Dejando que ambos se preparen para salir.

***

No había sido sencillo pero después de visitar algunos lugares de mala muerte habían conseguido algunas tareas sencillas para realizar.

Y pagaban tan bien que la primera noche de trabajo consiguieron lo necesario para lleva a Han al doctor. Los tres estaban en el consultorio esperando.

La pequeña Han era abrazada por JiMin.

— ¿Cómo consiguieron el dinero tan rápido? — Preguntó ciriosa.

— Tuvimos que prostituirnos.. —Susurro el menor serio pero al ver la expresion e  la cara de la chica después se carcajeo haciendo que sus ojos desaparecieran, Han sabía toda la mierda por la que él había pasado siendo menor así que era de esperarse que su broma terminara siendo de muy mal gusto. —Na, tuvimos un empleo que nos daban una buena paga. — Lo deja hasta ahí. No tenía porque decirle a Han lo que él y su novio hacían.

Yoongi estaba arreglando algunos negocios por lo que estaba hablando por teléfono. Habían conocido a un sujeto importante de apellido Jung quien había quedado tan satisfecho con su trabajo que seguramente los contrataría de fijo.

Si todo salía bien, pronto podrían abandonar ese asqueroso cuarto y salir de la miseria. Se convertirian en un par de Reyes que protegerían a su reina.

Fin del Flashback