Nuevas Nieves

1. Un viaje con un destino inesperado (parte 1)

En un aeropuerto, Imuruk estaba esperando su vuelo sentado en una banquilla, sujetaba la rienda de su bolso cruzado con ambas manos, mientras miraba al suelo evitando hacer contacto visual con quién pasara, se pasó la siguiente hora así, jugueteando con sus manos y pretendiendo estar usando el celular, hasta que este comenzó a sonar e Imuruk se apresuró en contestar con nerviosismo, al pensar que las personas lo empezarían a mirar por su tono de llamada.

—Inicio de la llamada—

Imuruk

¿Hola?... —dijo esperando una respuesta.

¿...? (V.O.)

¡No me llamaste! Me tenías preocupada, no es típico de ti.

Imuruk

Aah mamá, lo siento, tenia...

Madre (V.O.)

¿Todo está bien? —interrumpió ella—. No te olvidas de nada ¿Cierto, cariño?

Imuruk

Tranquila mamá, revise tres veces antes de hacer las maletas.

Madre (V.O.)

Bien, es que eres muy despistado cuando estas nervioso —suspira—. Quería asegurarme de que no te arrepientes de esto.

Imuruk

Estaré bien con la tía, necesito alejarme un tiempo. Te prometo que, si en algún momento me arrepiento, te lo diré.

Madre (V.O.)

Sabes que te iré a buscar si me lo pides. Te llamaré todos los días y si no respondes una sola vez ¡Te matare en cuanto te vea! No olvides que tu tía me lo cuenta todo, tienes que prometerme que estarás bien.

Imuruk

Mamá, estaré bien.

Madre (V.O.)

Y comerás adecuadamente, ¿Llevas todo cierto? ¿Te aseguraste de no olvidar nada?

Imuruk

Mamá... —repite, sin éxito de ser escuchado.

Madre (V.O.)

Sabes que puedes contar conmigo Imu, siempre te apoyaré, así que dime cuando quieras volver, cuando te sientas listo y necesites...

Imuruk

¡Mamá! —interrumpe— No te preocupes, puedo con esto —afirma, a pesar de ni el mismo estar seguro.

Madre (V.O.)

Tienes razón, me preocupo demasiado como siempre. Intentaré no pensar mucho. Trata de hacer lo mismo ¿Puedes, Imu?

Imuruk

Ajá, lo intentaré —Dice dubitativo.

Madre (V.O.)

A si me gusta ¡Y no te olvides de llamarme en cuanto llegues! Te quiero Imu mu.

Imuruk

Yo también mamá, adiós.

Beep, beep —fin de la llamada—

«Ella puede preocuparse demasiado a veces, pero también sabe leerme muy bien y la verdad es que si estoy un poco nervioso ¿Y si no sale como lo espero? —Inhala profundamente, después exhala— Quizás esta no sea la solución que necesito, pero es la única en la que puedo pensar.»