Solo somos primos... Un amor "imposible" #EDITANDO#

Capítulo 3:

Mi mente estaba a punto de explotar, no sabía qué mierda hacer en ese momento. Sentí cómo mi cuerpo se relajaba y todo se volvía negro. Lo último que sentí fue el impacto de mi cuerpo contra el suelo.

Nick's pov:

-¡Liz!- grité. Le tomé la cara con ambas manos y la sacudí ligeramente. Se había desmayado y estaba blanca como la nieve. Lo único que se me ocurrió fue llamar a mi madre.
Ambas, junto con mi tía, subieron desesperadas.

-¡¿Qué sucedió?!- preguntó mi tía, desesperada.
-Liz se desmayó- contesté.

De la nada, comenzó a moverse. Mi corazón volvió a latir.

Elizabeth's pov:

Abrí los ojos y vi a Nick sosteniendo mi cabeza. Luego vi a mi madre y a mi tía desesperadas.

-¿Qué sucedió?- pregunté mientras me sentaba en el suelo.
-Te desmayaste, Liz- contestó
-Aw...- vi a mi alrededor y toda mi ropa estaba tirada en el suelo. Al ver mi cuerpo descubrí que seguía estando en ropa interior y todo el papel que me rodeaba hace unos minutos se había roto y distribuido debajo de mí.

<<No puede estar pasando>>

Al reaccionar, mis ojos casi estallan. Miré a Nick, luego a mi madre y luego me incorporé, desesperada, tomando la toalla que estaba junto a mí y cubriendo mi cuerpo con ella.

-¿Por qué estabas rodeada de papel higiénico? ¿Por qué tu puerta estaba abierta? ¿Por qué Nick estaba aquí cuando te desmayaste?- preguntó mi madre, desconcertada.

-Eh... es una larga historia- dije, preocupada.

-Créeme, tengo todo el día- dijo ella.

Tragué saliva y dije:
-Luego de que Nick me mostrara mi habitación, yo decidí bañarme. Cuando entré en el baño me saqué la ropa y comencé a enumerar las cosas que debía tener en el baño, me dí cuenta de que había dejado la toalla y mi ropa en mi cama. Lo único que había para cubrirme era el papel higiénico así que decidí envolverme con él y salí...

-Espera- me interrumpió ella -¿Por qué no saliste simplemente como estabas?

-Había dejado abierta la puerta- contesté. Mi madre asintió y continué -Cuando tomé mis cosas me quedé hipnotizada al ver a Nicholas pasar por la puerta y reírse de mi estado, entonces mi presión sanguínea bajó por los nervios y me desmayé.

Noté que mi madre estaba tratando de contener la risa.

-Tu deber como madre es venir, abrazarme y preguntarme si estoy bien, no reírte de mi estupidez. En todo caso me la has heredado tú- la señalé con el dedo.

-Es que eres muy estúpida, Lizzie- dijo y se hundió en carcajadas más fuertes que el sonido mismo.
Todos comenzaron a reírse de mí y yo me harté. Entré en el baño, dejándolos riéndose en mi habitación. Esta vez sí traje la ropa.