𝗚𝗹𝗼𝗼𝗺𝗶𝗻𝗲𝘀𝘀

06.

"Almas, las almas no encuentran el descanso eterno al tener cuentas pendientes con los vivos"

Estaba caminando por un claro en el bosque, frente a una laguna cristalizada, un panorama muy bonito. A lo lejos la figura de una mujer de largos cabellos rosas me miraba fijamente, sus ojos jades me miraban con la misma ternura que lo hacía Sakura cuando vivía. Su brazos estaban abiertos como invitándome a acercarme y hacer lo que tanto he anhelado. Abrazarla.

Corrí hasta ella con lágrimas pequeñas salir de mis ojos cuando estaba a unos pasos de tomarla en mis brazos, todo se volvió negro.

Desperte agitado, no sabía dónde estaba y que había pasado conmigo, solo recuerdo ver a Sakura, aunque esa mujer se veía más mayor que Sakura. No se que había pasado pero estuve apuntó de suicidarme, palpe mi pecho y solo tenía una pequeña cicatriz, seguro me la hice al presionar mi espada contra mi pecho en el lugar que esta mi corazón.

Miró alrededor y estoy en una habitación blanca, tengo puesta ropa que no es mía y parece que me han bañado. No entiendo que pasa pero me levanto como puedo averiguarlo. Miro ami lado y mi espada está ahí conmigo, la tomo y desenvaino en caso de tener que defenderme. Aunque si soy sincero no sé si lo haría pues sería una oportunidad de morir.

Cuando llego hacia un salón me sorprendo al ver en las paredes los abanicos del logo de mi clan. Frente a un estanque de peces de colores está un hombre de cabello castaño largo, atado en una coleta y vestimenta blanca. Esta de espaldas como si no ha notado mi precencia. Giro mi visión y veo una vitrina de cristal pero no puedo ver quien está dentro por las flores que están tapando la visión.

El hombre no voltea ni se inmuta. Esto es demasiado extraño.

"Quién eres? qué hago aquí?" - Le pregunta el Uchiha exigiendo respuestas.

"Hmp, deberías de agradecer, casi te matas." - Le responde una vos grave y profunda que le erizo la piel.

"No se quien seas pero responde, que hago aquí y que quieres?" - le exige de nuevo el Uchiha.

"Lo único que quiero, es que te calmes y escuches con atención."- le responde el castaño levantandose, finalmente gira a dirección del Uchiha, Sasuke se queda petrificado, ese es Indra. Su antepasado, el hijo del Rikudo Sennin. Esto no podía ser real.

"Ja! crees que con este Hengue barato me vas a engañar? muéstrate cómo eres en realidad!" - Sasuke estaba perdiendo la paciencia no sólo interrumpió sus planes de ir a verla a ella si no que le quiere ver la cara de estupido.

"No son trucos baratos, Sasuke-Kun" - Sasuke siente su cuerpo entumecerse al oír esa vos, es tan parecida a la de Sakura. Temblando voltea detrás de él y la ve. Pero no es su Sakura, es idéntica a ella pero está mujer es mayor y tiene marcas moradas alrededor de sus ojos y su cabello es demasiado largo que puede llegar a tocar el suelo.

Siente unas ganas inmensas de ir abrazarla, así sea unos segundos, sabe que no es ella pero es como si lo fuera. Pero debe caer en la realidad, que está pasando? acaso si esta muerto? De forma instintiva toca su pecho pero siente su corazón latir. No está muerto, pero que está pasando?

"Te hemos traído aquí Sasuke-Kun, por que queremos acabar con la maldicion que cae sobre nosotros." - le dice la pelirosa mayor al Uchiha que la mira confundido.

"Que maldicion? si te refieres a la maldicion Uchiha, eso solo acabará si yo muero, soy el ultimo descendiente y la maldicion acabará cuando no hayan Uchihas que existan." - Le respondió Sasuke pensando que era eso a lo que se refería.

"No, no se refiere a eso, Seiren se refiere a la maldicion que cayó en cada una de mis reencarnaciones. Hay una maldicion que yo mismo provoque al elegir el poder maldito de la obscuridad. El odio y el rencor como la envidia y el egoísmo son la peor fuente de poder que dicha maldicion recae sobre mis reencarnaciones. "- comenzó su relato Indra, Sasuke solo lo escucha con atención.