Fake Love.

ix. Grocery beat ups.

  
   
  
| para ti |

Estabas comprando comestibles para tu familia, era un fin de semana y agradecías al cielo por el descanso de tu novio falso.

El día fue mucho más normal de lo habitual, hasta el punto de que no se sentía normal. El equipo de Sanzu que te acompañaba se convirtió en parte de tu rutina diaria y te habías acostumbrado.

Justo cuando pensabas que el día no podía ser más normal, viste a un grupo de hombres que parecían estar golpeando a alguien debido a su risa y al sonido del contacto del puño con la cara. Por curiosidad, fuiste a ver el alboroto.

"¡Oigan! Tener una pelea frente a una tienda de comestibles es patético y—"

Deteniendo tu oración, tus ojos se abrieron cuando uno de ellos se giró a mirarte, revelando mechones de color rosa.

'¿No puede ser, Pinky?' Te quedaste allí en estado de shock mientras los hombres te miraban por detener su diversión.

"¡¿Quién eres tú para interrumpir nuestra sesión de palizas, niñita?!"

Caminó hacia ti, tronándose los nudillos en el proceso mientras aumentabas el agarre en tus compras. El hombre estaba a punto de golpearte hasta que el chico golpeado lo detuvo. "No toques.. "

"¿¡Qué dices!?" Sanzu se agarró el estómago, estaba verdaderamente herido pero no iba a dejar que te lastimaran por su culpa.

"No toques.. a mi novia." señaló al hombre que estaba cerca de ti con una mirada desagradable en su rostro. El grupo de hombres se miraron sorprendidos.

Todos se rieron, encontraron divertido que Sanzu Haruchiyo en realidad tuviera novia, especialmente porque ese mismo hombre los había golpeado una vez antes, "Te has vuelto suave, Sanzu. No puedo esperar para matarlos a ambos, ¡Pero no te preocupes, la tumba de tu reina estará justo al lado de la tuya!"

Sanzu entró en pánico, en realidad estaba en pánico. Todo lo que quería era llevar tus bolsas de compras y quizás acompañarte a casa, pero lo emboscaron.

Sí, podría haberlos vencido fácilmente con unos cuantos golpes, pero estaba allí únicamente para ti. No quería que lo vieras con la sangre de unos cuantos hombres medio muertos, pero ahora lo que no esperaba era que te involucraras.

Esperaba que ignoraras al grupo de hombres golpeando a alguien, salió de su trance cuando uno de los hombres le dio un puñetazo en la cara, "¡Oye Sanzu! ¡Mira a tu novia en sus últimos momentos!"

El hombre y sus compañeros comenzaron a reírse una vez más, pero se detuvieron cuando te escucharon reír también.

"Niña.. sabes que estarás muerta en unos segundos, ¿Verdad?"

Dejaste de reírte, limpiaste tus lágrimas, le diste al hombre una sonrisa tranquilizadora con los ojos cerrados, agitando las manos frente a tu cara, "Oh, lo siento, lo siento, me estaba riendo del chico de cabello rosado."

"Creo que olvidó que lo golpeé dos veces antes." abriste los ojos, sonriendo.

Lamiendo tus labios, tronaste tus nudillos con emoción mientras tu puño entraba en contacto con su fea cara, luego vino otro, y otro.

Terminando la pelea unilateral con tu último golpe, lo pateaste donde estabas segura que le dolería.

Por supuesto que Sanzu estaba hipnotizado, pero tu último ataque le dio un déjà vu desde el momento en que te invitó a salir por primera vez.

Cuando terminaste, te sacudiste las manos con disgusto y deleite, miraste a sus compañeros mientras sus ojos estaban puestos en su jefe ya desmayado.

"¿Quién es el siguiente?"