Capitulo 4 - "Laberinto psiquiátrico"

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Punto de vista de Lirio
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Pestañeé y de un momento para otro la Rubí que las acompañaba había desaparecido. ¿Qué demonios es este lugar y por qué tanta seguridad para solo un par de adolescentes? Sus uniformes eran de pacientes, aunque se veían un poco anticuados. Ouro, recién despertado, estaba tan confuso que no dijo ni una sola palabra.

Si esto es exactamente como la anterior vez... sería complicado explicarle.

—Como te lo digo... Hemos sido forzados a entrar en los recuerdos de Rubí, la cual está muerta, ahora deberemos averiguar cuál de estas dos chicas es ella, seguirla hasta presenciar su muerte la cual se supone que está cerca, y en ese momento deberemos consolar su alma para des-corromperla y que pueda descansar en Paz.

Demasiada información en muy poco tiempo supongo, porque Ouro se echó a llorar nada más oírlo.

—Para simplificarlo... encárgate de seguir a la chica de pelo castaño ¿sí? Si ocurre algo raro ven de inmediato a buscarme. Recuerda que aquí no te pueden hacer daño.

Asintió atemorizado y después de tanta cháchara volvimos a prestar atención a las dos adolescentes. La chica castaña estaba en la parte de arriba de su litera hablando con la chica rubia que estaba peinándose en el espejo. Las risas y la amena conservación se detuvieron cuando la chica de pelo marrón volvió a abrir la boca, pero esta vez con gran preocupación.

"Michelle, quería comentarte algo..."

¿Michelle? ¿Así se llamaba la rubita? Ahora solo necesitábamos saber el nombre de la otra.

"¿Hmm...? ¿Que ocurre?"

Respondió Michelle.

"Antes, hace solo unos minutos, vi algo..."

Continuó la castaña.

"¿Recordaste tomarte las pastillas esta mañana? Si quieres te acompaño a una revisión."

Agregó Michelle, creo que estoy comenzando a entender donde estamos.

"Sí, sí, las tomé, sería imposible que me hubiese saltado el control. Solo que esta vez fue diferente..."

"¿Diferente en que sentido? ¿A qué te refieres?"

"Mejor olvídalo, debe ser el cansancio. Por cierto, ahora tienes sesión con el psicólogo, ¿no?"

"Ugh, ese viejo arrugado, pero sí, así es."

"Ja, ja, pues tendrás que ir, nos vemos luego."

La chica castaña dio un par de palmadas en la espalda a Michelle desde su litera y así Michelle pulsó un botón para solicitar abandonar la habitación.

"Michelle Byers, tengo sesión con el doctor Hershell."

Tras unos momentos le dieron el visto bueno y el guardia al otro lado de la puerta le abrió, antes de marcharse se giró hacia su compañera una última vez.

"Charlie, recuerda que puedes confiar en mi, ¿sí?"

Aparentemente la chica morena se llamaba Charlie.

Death BurrowDonde viven las historias. Descúbrelo ahora