Esta historia comienza unos cuantos años después del tsukuyomi infinito, Naruto esta a pocos meses de ser asignado como el nuevo Hokage de Konoha, en este mundo paralelo Naruto aun esta soltero y en una relación con Sasuke debido a que jamás existió...
Después de mucha espera para ambos, por fin juntos iríamos al chequeo de rutina yendo al médico, para ver al bebé en el ultrasonido y si salía todo bien de paso podríamos enterarnos sobre si será un posible varoncito o una mujercita.
Comenzó el día como de costumbre yo muy acurrucado en la cama con la mayoría de las cobijas y las almohadas en mi posesión y Sasuke abrazándome bajo ellas para no morirse de frío ya que el invierno se acercaba.
Al voltearme le susurro un buenos días, beso su frente y al abrir levemente sus ojos aún provistos de sueño me responde que también me desea un buen día pero que se levantaría en un momento más ya que aun tenía tiempo de sobra antes de irse a trabajar.
Mientras me levantaba de la cama para dirigirme al baño y darme una ducha, me preguntó como a que hora deberíamos reunirnos con el médico, le dije que a las 14, por lo cuál al ver la hora que no pasaba de las 9, me aseguro que haría lo posible por desocuparse a una hora prudente para reunirse conmigo antes del entrar al recinto de salud.
Las primeras horas pasan y tras desayunar, Sasuke se despide de mi para ir a la oficina de kakashi como hokage.
Al despedirse me vuelve a asegurar que tratara de que su reunión con kakashi será breve y tras darle un beso y su caja de almuerzo le deseo que tenga una buena jornada laboral.
Ya a solas me pongo manos a la obra para ponerme a hacer un poco de aseo en el hogar, y para cuando termino se han hecho la 12 de la tarde por lo que me tomo un breve descanso para luego ponerse de lleno a preparar el almuerzo.
Suena el timbre y me alegro al ver tras la puerta esta temari con su hijo quien viene bastante entusiasmado con una felicidad que me sorprende, por lo que tras darle la bienvenida a mi hogar le pregunto a Temari a que se debe tanta alegría.
Al escucharme, Temari se dirige a la cocina y dejando unas cuantas cosas en la alacena que me había traído a casa, de manera desinteresada por simple gesto de amistad hacia mí, me comenta que pronto será el cumpleaños de Shikadai por lo que había ido a buscarlo a la academia para que le acompañase a ver la decoración y la opción de golosinas que le gustaría que estuviera para su fiesta.
Al terminar de hablar, me pongo a su altura y dirigiéndome a Shikadai con quien cuenta todavia con 5 años de edad le adelanto que por mi parte le deseaba la mejor de las felicidades por su pronto cumpleaños, este al oírme me lo agradece y sacando un sobre de invitación del bolso de compras de su madre me lo entrega para decirme que estoy invitado a su fiesta.
Le agradezco y le aseguro que me encantaría ir.
O
bservo la hora y procurando que Shikadai pudiese jugar con total libertad en la sala, retorno a la cocina y Temari se ofrece a ayudarme en la preparación del almuerzo de hoy, argumentando que en mi condición actual debería tomarme un respiro y descansar de vez en cuando antes de retomar mis labores en el hogar.
Quiero objetar pero al final termino aceptado su indicación, tomo asiento con algo de dificultad y observo al único niño en casa jugando alegremente con su dinosaurio de juguete.
Sin dejar de mirarlo a mi mente viene la imagen desconocida de un pequeño niño de cabellos azabaches y ojos azules sosteniendo mi mano con firmeza junto a la de Sasuke aludiendo que podríamos ir al parque luego de merendar.
Sonrío al ver tan nítida imagen en mi mente y pienso que de hacerse realidad aquello me haría muy feliz.
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Después de tiempo subo un nuevo capítulo, espero que les haya gustado.
