Sanando Heridas

Capítulo 14

- Jiang Cheng, antes que lo olvide – XiChen de sus túnicas saco una pequeña pieza de Jade – cuando sientas que tus sentimientos me corresponden, utiliza esto en el cinturón de tu vestimenta, entonces nos casaremos.
- Esta bien XiChen, por el momento lo guardaré – dijo Jiang Cheng sonriendo – bueno , ya es tarde, lo mejor es que me retire – así que Jiang Cheng se giro para irse.
- Espera Jiang Cheng – XiChen jalo de la mano a Joan Cheng y le robo un pequeño pico – ahora si, buenas noches Jiang Cheng.
- XiChen! Que haces – se sonrojo Jiang Cheng.
- Haré todo por conquistarte y comenzaré desde ya.
- Me voy, ya es tarde, buenas noches XiChen – Jiang Cheng salió rápidamente de la habitación.
Al llegar a su habitación pensó en todo lo que pasó, él sabía que le gustaba XiChen pero no sabía si a tal magnitud para decir que esta enamorado, no quería apresurarse, iba a esperar para ver como lo trataba de conquistar XiChen, de tanto pensar en eso y porque no había descansado bien anteriormente, se quedó dormido sin darse cuenta.
- A-Cheng! ¡A-Cheng! – entró muy temprano por la mañana Wei WuXian – que pasó con el hermano XiChen! Cuéntame no me tengas con la intriga.
- Que haces aquí tan temprano! – se enojó Jiang Cheng – no puedo creer que por andar de curioso te levantes temprano!
- Obvio, tengo que saber todo lo que pasa en la vida de mi hermanito, así que habla.
- Yo no he dicho que te voy a contar nada.
- A-Cheng no seas así, aparte alguien me pidió que te lleve a un lugar para una sorpresa y si no me cuentas, no te llevó a ningún lado – Wei WuXian se comenzó a reír .
- ¡Eres un insoportable! – le grito Jiang Cheng – XiChen se me declaró y me pidió una oportunidad para conquistar me.
- ¡¡Y que le dijiste!! – dijo curioso Wei WuXian
- Acepte, quiero saber que tan enserio son sus sentimientos por mi.
- Es decir, que tu ya tienes claro tu sentimientos? – interrogó Wei WuXian.
- Me gusta – admitió un poco avergonzado Jiang Cheng – se que también le gusto, pero no se que tan fuertes sean sus sentimientos por mi.
- Jiang Cheng – le habló serio Wei WuXian – el hermano XiChen va enserio contigo pero es normal que quieras ir despacio con él y cualquiera que sea tu decisión, cuentas con mi apoyo.
- Gracias, pero ahora si, dime a donde te pidió XiChen que me lleves.
- Cierto, casi lo olvido – dijo Wei WuXian – vamos, el hermano XiChen te debe estar esperando.
- Espera – lo detuvo Jiang Cheng – antes quisiera darte algo que en un determinado momento te fue arrebatado pero que siempre te perteneció.
- Un regalo de mi hermanito, pero no es mi cumpleaños, dime que es.
- Esto – y Jiang Cheng de su túnica saco una campana de la claridad correspondiente a la secta Yummeng Jiang – se que ahora vives en Gusu Lan, pero quiero que sepas que Yummeng también es tu hogar, eres mi hermano, mi familia, y quiero que sepas que no cometeré los mismos errores de antes, siempre contaras conmigo
- ¡A-Cheng! – Wei WuXian se tiro a los brazos de Jiang Cheng mientras lo abrazaba – muchas gracias, tener esto devuelta significa mucho para mi, pero basta porque me vas hacer llorar – lo agarro de la mano y lo jalo fuera de la habitación – mi cuñado nos espera.
Jiang Cheng estaba algo nervioso porque no sabía lo que había preparado XiChen, pero a su vez estaba emocionado, cuando se detuvieron, estaban frente a un salón algo alejado que estaba cerca del Hanshi y se notaba era un poco más pequeño que el resto. Wei WuXian lo dejó en la puerta y lo hizo entrar para luego retirarse.
- Pasa Jiang Cheng, siéntate a mi lado – le dijo XiChen.
- Que pasa XiChen, porque nos reunimos aquí.
- Se que el día de hoy debes regresar a Yummeng, así que prepare esta sorpresa – frente a ellos se encontraba comida tradicional de Gusu – ya que nuestra comida suele ser un poco insípida, yo la prepare y le agregue un poco de picante, también traje una botella del sonrisa del emperador, que según el maestro Wei es deliciosa.
- XiChen, no debiste molestarte pero muchas gracias – dijo feliz Jiang Cheng, en eso observo que XiChen tenía leves cortadas en la mano – pero que te paso!!!
- No estoy acostumbrado a cocinar así que me lastime un poco, pero estoy bien, no te preocupes, además la comida quedó bien – sonrió XiChen.
- Igual, donde hay una pomada para poder curarte – comenzó a buscar Jiang Cheng, en eso encontró una encima de una mesita que se encontraba cerca, se sentó a lado de XiChen y lo comenzó a curar – debes tener más cuidado, no debes lastimarte.
- Acaso A-Cheng te preocupas por mi – le sonrió coqueto XiChen
- Pues claro que si – habló sin pensar Jiang Cheng, luego se dio cuenta y se comenzó a sonrojar – es decir, somos amigos…
- ¿Solo somos amigos? – agachó la cabeza XiChen.
- Sabes a lo que me refiero!
- No lo se
- Eres alguien importante para mi! Así que me preocupa que te pase algo – grito Jiang Cheng mientras se ponía aún más rojo.
- Tu también eres importante para mi A-Cheng y cada vez me enamoró más de ti – le sonrió XiChen – pero para que me sienta mejor necesito algo más.
- Y que necesitas – pregunto Jiang Cheng.
- Un beso tuyo.
Jiang Cheng estuvo a punto de negarse pero ya estaba cansado de negar lo que sentía, así que acercó su rostro al de XiChen y lo besó, al principio fue un beso lento que poco a poco fue tomando más fuerza, sus lenguas se entrelazaban, Jiang Cheng no se dio cuenta en que momento término sentado encima de XiChen, el beso se volvía más apasionado, XiChen agarro la cintura Jiang Cheng y lo pego más a su cuerpo, Jiang Cheng estaba tratando de desatar la cinta de la frente XiChen y se movió para tratar de acomodarse logrando que se tropiece con la mesa y se separaran por el ruido.
- Lo siento, me deje llevar – dijo Jiang Cheng avergonzado.
- Tranquilo A-Cheng, esta bien, estamos haciendo lo que sentimos.
- Si, pero toque la cinta de tu frente y yo se que eso es algo especial para tu secta.
- La cinta de mi frente solo la pueden tocar mi persona predestinada, la persona que voy amar para toda mi vida, así que esta bien que la toques, estas en todo el derecho.
- No se que decirte, estoy comenzando a entender mis sentimientos por ti, pero quiero tomarme mi tiempo para expresarlo.
- No te estoy apresurado, vamos a tu ritmo, yo te voy a esperar el tiempo que sea necesario.
- Gracias – le sonrió Jiang Cheng – bueno, ya debo irme, tengo asuntos que resolver en Yummeng.
- Espera
- Que pasó
- Esta bien que te llame A-Cheng – pregunto XiChen.
- Ya me dice así
- Pero quiero saber si te molesta
- Me parece bien, me gusta que me llames así – le sonrió.
- Y tu me puedes llamar A-Huan – le sonrió XiChen.
- Adiós A-Huan, nos vemos pronto – dijo Jiang Cheng
- Adiós A-Cheng, te voy a extrañar.
Antes de salir de la habitación Jiang Cheng le dio un pequeño beso a XiChen dejándolo con una sonrisa antes de salir y de dirigirse a Yummeng.