Capitulo 13. Mis disculpas

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Muéstrame que la humanidad merece otra oportunidad, hazme creer que todo estará bien si ellos siguen aquí y que todo mejorará, obligame a no tomar la decisión correcta, porque de ser así tu ya no estarías aquí.

Era finales del año cuando mi último respiro en mi primer cuerpo mortal se escuchó en las paredes de aquella oscura cueva, respirar el aire libre me quemaba los pulmones y mi cuerpo no podía más, pero pese a que era mi último respiro no tenía miedo a perderme en el vacío del universo ya que sabía que jamás sería merecedora de la paz del primer círculo, pero, aunque no fuera una mortal seguía teniendo ese instinto de supervivencia y sobre todo conocí el amor; amor a primera vista, amor a la vida, amor a ella y a su alma.

Cuando los originales descubrieron mi origen también descubrieron por primea vez lo que era el temor, ese sentimiento de angustia por lo que podría pasar, sin embargo no se me dio la oportunidad de demostrar que estaban equivocados, aunque si soy honesta jamás hubiera hecho lo que hice si nunca me hubiera enterado de quien era hija, tal vez hubiera sido diferente, pero eso ya no importa porque aunque el tiempo se pueda doblar y manipular, no se puede regresar, no puedes cambiar algo que pasó hace un segundo, ya está hecho, superalo.
Mi padre se enamoró de una destructora, la falla de los originales, alguien que es mitad inframundo y mitad mortal, esa esencia que jamás debió cruzarse. La creación que jamás debió existir fui yo y aún así pague por el error de mi padre, el guardián de la vida que irónicamente arrebató la mía.
Camine en el círculo terrenal por miles de años y mientras mi esencia inmortal se desvanecía poco a poco fui envejeciendo pero, en 1530 en un pueblo americano conocí a una mujer, ella era hermosa y estaba llena de vida, jamás había visto a un mortal tan de cerca nisiquiera sabía lo que era la vida al borde la muerte, no entendía como podían vivir tan plenamente sabiendo que cada segundo que pasaba era un paso más cerca de la muerte, aún así ella gozaba que segundo hasta que el hombre apareció para destruir todo ese gozo. La vi crecer, vivir y amar, pero no había tomado en cuenta que la vería morir y sabía que eso tendría que pasar, intente asimilarlo y supe que tendría que verla morir de anciana, pero eso no pasó así, los humanos le arrebataron la vida como si fuese nada, como si eso los beneficiará de alguna forma, fue el acto más cruel que mis ojos habían presenciado y el sentimiento más puro que mi corazón y alma habían sentido, así que solo paso, en un chasquido y ahogada en mi grito de dolor aparecí por primera vez en el vacío, el punto cero de mi creación, lo que era solo el comienzo de lo que haría.
Normalmente el orden natural era que los mortales murieran y su esencia se perdiera en el basto universo, esa esencia que jamás regresaría, algo que sólo existiría una vez, no tenían permitido conocer ningún círculo. Siempre pensé que eso era injusto y creí que merecían otra oportunidad, creí que merecían tener su propio círculo donde su alma de postrara.
Cree la reencarnación, la oportunidad de que la esencia mortal pasara por varios años, pero no lo hice de la mejor manera, yo solo quería poder ver su rostro y sus ojos llenos de vida otra vez, pero destruí el equilibrio del universo, lo partí en mil pedazos y cada trozo nació una nueva vida, el mismo mundo con diferente orden, un lugar donde los guardianes no podían tocar, era la única forma en la que las almas podían viajar sin destruirlos a todos, pensé que todo iba a estar bien, los guardianes no sabían que era lo que había creado, jamás lo imaginaron, no sabían en qué plano terrenal estaba.
En los 1700 seguí acompañando la vida de aquella mujer y por primera vez escuché su nombre, Alondra, en esta vida la encontré cuando ya era toda una mujer, pero la vi amar a un hombre equivocado, Dorian, quien había sido desterrado no hacia mucho y su primer acto en la tierra fue amar, intente alejarlo mucho tiempo sin que me descubriera pero, el amor de Alondra ya había crecido mucho y no me lo permitió, hizo una larga vida con él hasta que murió naturalmente y esa fue la primera experiencia dolorosa de Dorian, pero resultó ser aún más débil y como el no sabía lo que yo había ocasionado pensó que jamás volvería a verla así que huyo del plano terrenal.
Pase más de 100 años esperando a que Alondra apareciera de nuevo, pero en el transcurso me enamore de un hombre con quien compartí mi vida y fue ahí el peor error, fue cuando descubrí lo que en realidad había hecho.
Vincule las almas terrenales para que estas tuvieran un propósito, algo que las hiciera aferrarse aquí y no solo a un cuerpo físico, conecte sus almas por medio del amor, por eso aunque el primer amor de Alondra fuera Dorian no volvió con él porque Dorian no era un mortal y lo que significaría lo mismo para mí, jamás volvería ver a Carlos cuando muriera. Ambas almas volvieron al primer universo donde todo había comenzado, tarde cientos de años para encontrarlos y fue ahí cuando decidí vincular mi vida a la mortal para que ninguna de las dos muriera y yo pudiera tener mi vida con Carlos y el siempre volviera a mi. Fui egoísta.
Le arrebate la vida a quien hoy era Victoria, una chica de tan solo 20 años, era una soñadora, buena hija y hermana, su alma era exactamente igual de cuando la conocí por primera vez, ella me hacía amar la vida, sin embargo le arrebate todo eso en un pestañeo y nunca lo supo.
No sabia como, ni siquiera porque razón pero encontré a mi Carlos, era tan perfecto, pero nunca pude acercarme de nuevo, la esencia de Victoria luchaba con la mía y todo empeoró cuando apareció él, al parecer mientras no estuve Victoria encontró su atadura terrenal, se enamoro de la esencia de quien ahora era Jackson, su atracción era tan fuerte que no me dejaba conectar mi vínculo, así que me aprisionó en su mente llevándome a él vacío donde yo la tenía, donde me perdí por muchos años y ahora ella estaría perdida lidiando con lo que yo había creado, sin saber nada.
Intente contactar a Stephan muchos años, necesitaba su ayuda para volver a tomar el control del cuerpo, pero solo me podía ayudar muy poco tiempo, la esencia de Victoria divagaba por el roto universo cambiando de este plano al suyo, era como un sueño donde solo yo aparecía mientras ella dormía y cuando por fin había logrado permanecer más tiempo con el control, los humanos me atraparon dejándome en invernación, donde la esencia de Victoria se fortaleció por muchos años haciéndola más fuerte que la mía, donde no pude volver hasta que ella murió; jamás pensé que Dorian sería el que me liberaría, no creí que su ambición fuera más grande que su amor y aunque él espera otra cosa de mi no sabe que yo fui quien le arrebató todo.

Victoria, lamento haberte arrebatado tu vida, lamento que mi amor me cegara, lamento no permitirte aferrarte a tu ancla terrenal y sobre todo que olvidarán tu nombre.
Lo lamento Sara.

THE CHAOSDonde viven las historias. Descúbrelo ahora