En los Grises Más Obscuros

Púrpura

Will Solace se pregunta si debe estar un poco ofendido en nombre del Campamento Mestizo, ya que la mayoría de los amigos cercanos de Nico son romanos. 

Ya pasaron dos años de su amistad, y, aparte de la aparición de algunos que otros semidioses en misiones, los tiempos han sido pacíficos.  Se siente un poco como la vida antes de Percy Jackson, pero no del todo.  Los campistas tienen cicatrices en formas que ni siquiera el mismo Asclepio podría haber evitado;  que han herido y han sanado. 

 No son las mismas personas, pero eso está bien. 

 Will recuerda la primera vez que vio a Nico, hace tantos años.  Era pequeño, excitable y muy abierto acerca de sus opiniones.  Hay restos de ese chico en el guerrero que es hoy: lo honesto que es  cuando está cansado, la energía enroscada en sus gestos, y el aspecto físico de su afecto que sólo aparece cuando Nico está demasiado distraído para contenerse.  Ellos muestran que el cambio no es igual a la destrucción. 

 Sentado al lado de Nico en una toga de color amarillo brillante se encuentra Will, agradecido por las nuevas tradiciones. 

 Están en una reunión del Senado, la primera que se celebra en colaboración con los griegos.  Es todo muy formal y serio, por lo que Will hace su mejor esfuerzo para no reírse cuando la caida de Dakota trae a otros tres centuriones al suelo junto con él.  Nico sonríe, pero es mucho mejor para mantener su risa bajo control. 

 Frank y Reyna de pie en un podio, acompañados de Annabeth y Percy que han sido elegidos como representantes del Campamento Mestizo, aunque sólo sea para esta reunión.  Uno podría imaginar que se vean ridículos en traje romano, pero la autoridad que los cuatro irradian es abrumadora. 

 El orgullo en la sonrisa de Nico ilumina su expresión. 

 "Nuestro fin último de negocio implica las interacciones futuras que vamos a tener con los griegos," Reyna declara con severidad.  Sin embargo, sus ojos brillan extrañamente, con diversión mas que sombríos.  Es una buena mirada en ella.  "Todos ustedes han sido informados de los intercambios que hemos planeado.  Supongo que la necesidad de un embajador permanente se ha notado". 

 Ella da un codazo a Frank, cuyo rostro se contorsiona en una mueca rápida, antes de volver a la normalidad. 

 "Después de una cuidadosa deliberación, se decidió que sólo dos candidatos poseían las características requeridas, la experiencia y el respeto de ambos campamentos." Sus labios se tiran hacia arriba.  "Hazel Levesque, embajador de los romanos, y... Hm ..." 

 Cuando se hace una pausa, bajando los ojos al suelo, Annabeth da unos pasos hacia él y pone una mano en el hombro de Frank y se mueve hacia adelante.  Su mirada se detiene en Nico. 

 "Nico di Angelo, embajador de Hades.  Ahora, el embajador de los griegos. "Hace un gesto para que se acercara al escenario. 

 Will piensa que si su hermana no estuviera aquí, él permanecería sentado, probablemente demasiado sorprendido para moverse. Hazel tira de Nico con una sonrisa y le obliga caminar  hacia los demás. 

 A su alrededor, la gente aplaude, pero el chico de cabello oscuro lo está mirando a él.  Will mira atrás, tratando de ser reconfortante.  Se siente casi mareado de las delicias que se posan sobre su pecho, porque esta es una prueba irrefutable: hay un lugar para Nico aquí. 

 Will quiere silbar, pero Percy lo hace en su lugar. 

 Por un momento, su alegría es el caos. 

 Entonces, Julia - la niña que ayuda a Término aparece con dos paquetes y se los entrega a los pretores romanos.  Frank da inmediatamente el suyo a Hazel, el rubor crece en sus mejillas, junto con las palabras en voz baja dadas.  Reyna, sin embargo, abre el envoltorio, dejando al descubierto una toga púrpura. 

 Cuando se vuelve a Nico, el Senado se queda en silencio. 

 "Yo te di ese atuendo porque quería algo que te distingue de nuestras filas.  Como todos ustedes saben, los hijos de Plutón son raros. "Reyna agarra las manos de Nico, depositando sobre ellos la toga.  "Ahora, yo te doy los colores de Nueva Roma.  Entiendo tu incertidumbre sobre nuestra tregua y la comparto, pero Nico ", sonríe," siempre serás bienvenido aquí. " 

 De repente, se siente como si estuviera reviviendo la fogata de hace dos años, pero a la inversa.  Nico - más alto y con más confianza — envuelve a Reyna en sus brazos, mientras la multitud aplaude de nuevo. 

 No pasa mucho tiempo para que Hazel haga lo mismo, tirando a Frank con ella.  Percy y Annabeth no se unen el abrazo, pero la mirada en sus ojos es más cálida de lo que ha sido en años. 

 Aunque Will nunca había pensado en la aceptación viniendo de aquel color, él supone que el púrpura lo hará.