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𝟎𝟎𝟖. vidente ─────────────
Mara
—Ha venido también ella— dijo mirándome desde su silla de ruedas. —La primera vez que vi esos ojos esmeralda llegaste a impresionarme, pensé que ya no quedaba nadie como tú.
—No hemos venido aquí hablar de mi hermana, ya te he quitado parte de tu dolor— espetó Scott. —Dime cómo vencerlo.
Allison nos había dejado entrar al lugar donde tenían encerrado a Gerard, mi hermano fue a preguntarle si había algún modo de vencer a Deucalion, y no iba a dejarle ir solo.
—Fácil, no podéis— contestó.
—No te creo— hablé. —Es imposible que no haya ninguna forma de vencerlo.
—Vámonos, está claro que no tiene ni idea, no sabe nada, perdón por haberos hecho perder el tiempo— dijo Allison. Estábamos abriendo la puerta en cuanto Gerard habló:
—Esperad— hizo una pausa. —hay algo que si puedo deciros..— mencionó, los tres lo miramos expectantes. —puede que Deucalion no tenga ojos, pero no siempre es ciego— comentó. Nos hizo un gesto para que nos sentáramos. —Ennis, Kali y Deucalion estaban en un desguace antiguo antes de que mataran a toda su manada y crearan su súper equipo de estrellas.
—No todos vivían aquí, ¿no?— Gerard negó ante la pregunta de Allison.
—Pero sí que vivía aquí una alfa especialmente poderosa. Podía metamorfosearse algo poco común entre los suyos. Eso la convertía en líder. El tipo de persona a la cual se dirigían en busca de consejo. Talia Hale— comentó. La madre de Derek, mi hermano y yo nos miramos cada vez más intrigados. —Los hombres lobo tomaron la venganza por su parte, se que Ennis fue al hospital pidiendo ver el cuerpo partido a la mitad de su beta, pero nadie le dejó—. Gerard se levantó de la silla de ruedas. —¿Conocéis el mito de Licaon?
—Sabemos que de ahí viene la palabra licantropia— comenté.
—Según el mito algunos griegos creían que le debían la vida a Prometeo, y no a los dioses del Olimpio. Algunos tomaron hombres de Titanes para honrarles a ellos y no a los dioses.
—Como Deucalion— dijo Scott.
—Hijo de Prometeo— continúe.
—Licaon no solo se negó a honrar a los dioses, los desafió, invitó a Zeus a un banquete e intentó darle de comer carne humana. Enfurecido, Zeus hizo explotar ese lugar con rayos, y convirtió a Licaon y a sus hijos en lobos como castigo. Lo que no es tan conocido es que Licaon pidió ayuda a los druidas para que le volvieran a hacer humano.
—¿Por qué a los druidas?— preguntamos los tres al mismo tiempo.
—Se creía que los antiguos druidas podían metamorfosearse, no consiguieron cambiar de forma a Licaon y a sus hijos pero si les enseñaron a transformarse. Y así, los druidas se convirtieron en consejeros para las manadas.
