Jeff Satur es un guapo músico tailandés de veintisiete años, el cual es muy consciente de que es el amor platónico de muchas y muchos fans en su país. Sin embargo, su corazón se mantiene cerrado a cualquier intento de entrar en él pues sus últimas r...
Tras saludarse, la reportera y Barcode se sentaron en uno de los sofás y siguieron esperando en silencio.
... -Les traigo algo de beber y de picar mientras esperan-dijo de repente un guapo chico ojiazul con una bandeja tras abrirse la puerta.
-Muchas gracias, es muy amable-respondieron ambos al unísono.
La espera resultó ser más larga de lo que Barcode creyó pero finalmente la puerta volvió a abrirse y el esplendoroso ídolo entró portando una de sus más lindas sonrisas.
La rubia reportera se levantó como un rayo, caminando hasta la puerta donde hizo una media reverencia.
-Oh señor Satur, soy una de sus más grandes admiradoras, mi nombre es May y trabajo para la revista Music Actual...
-Si, sé quién es-le interrumpió rápidamente el cantante mientras hacía un ademán con la mano- Puede empezar cuando quiera.
La fotógrafa resopló molesta pues quería haber conseguido un gesto amoroso de este pero no ocurrió tal, ya que Jeff dirigió su atención al joven y nervioso muchacho.
-¿Eres Barcode verdad?-preguntó acercándose.
El estudiante asintió con la cabeza repetidas veces pues estaba tan impresionado que no podía articular palabra.
El cantante era aún más guapo en persona y lo rodeaba un aura muy brillante, aunque Barcode no pudo dejar de reparar en sus ojos, los cuales parecían reflejar una inmensa tristeza.
Jeff era muy celoso con su vida privada, por lo que nadie tenía por seguro su orientación sexual y mucho menos si este tenía pareja o no, por lo que el muchacho lo achacó a que estaba agotado del concierto.
La sesión de fotos comenzó y mientras Barcode temblaba como un flan, Jeff hizo todo lo posible por sonreír casi mecánicamente.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
...-Tranquilo chico, no voy a comerte, relájate-dijo entre dientes en un momento en el que Barcode pareció desmayarse.
-S-Si, cla-claro, lo sie-siento.
-Pronto terminará, ella se irá y todos respiraremos aliviados.
Tras escuchar eso, Barcode miró con algo de decepción al cantante pues percibió que este no estaba muy de acuerdo con lo que estaba aconteciendo.
-Si, cla-claro
Luego de unas cuantas poses más.
-Bueno he terminado, muchas gracias señor Satur, ha sido un honor, un verdadero placer estar aquí con usted.
El cantante asintió sin mucho afán y a continuación levantó la mano para despedir a la mujer.
-Ok, ok, gracias
La puerta una vez más se abrió y esta vez fue Ta, el representante de Jeff quien apareció.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
-Por aquí señorita, le acompañaré a la salida- habló este acercándose a la reportera.
-Si pero es que yo querí....
-Su tiempo ha terminado, gracias por venir-volvio a hablar el representante- ahora dejaremos solos a Jeff y al ganador del pase VIP.
-Pe-Pero es que y-yo....
La mujer todavía no quería irse pero fue casi empujada a la salida, ante la inquieta mirada de Barcode y la incomodidad del cantante.
Luego de eso, pasaron unos veinte minutos más en los que el chico estuvo con su cantante favorito, el cual no dejó de mirarlo fijamente mientras esperaba a que Barcode respondiera a todas sus preguntas.
...-¿Tienes familia?, ¿Hermanos?
-No, soy hijo único
-¿Te gusta estudiar?
-Si, claro
-¿Cuantos años tienes?
-Diecisiete
-¿Te gusta viajar?
-Oh claro, aunque no lo hago mucho...
A pesar de tener una extraña sensación en todo ese tiempo, el muchacho disfrutó ese privilegio todo lo que pudo, ya que era una oportunidad única en la vida.
Jeff además le firmó varios autógrafos e incluso le regaló su último CD, el cual aún estaba por salir al mercado, lo que hizo que con gran emoción, Barcode perdiera la vergüenza y se abalanzase a abrazarlo.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Lejos de incomodarte, el cantante respondió gustoso a ese inesperado gesto, sin saber muy bien el porqué pues realmente se sentía bastante mal y triste por su ruptura amorosa, sin embargo ese momento le hizo sentirse extrañamente cómodo.
Tras salir de allí, Barcode buscó a su amigo y juntos regresaron a casa, aunque este lo hizo flotando en una nube, ya que esa noche había sido mucho mejor de lo que nunca hubiera soñado.
