꒰ ✿ ; 6O ꒱

772 62 37
                                    

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

im nayeon amaba leer, y también escribir, aunque sabía que los finales de aquellos hermosos libros, tanto los felices como aquellos dramáticos, eran una completa farsa

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

im nayeon amaba leer, y también escribir, aunque sabía que los finales de aquellos hermosos libros, tanto los felices como aquellos dramáticos, eran una completa farsa.

nayeon sabía que jeongyeon y ella no terminarían sus vidas en medio de un paraíso tropical tomando agua de coco y siendo abanicadas por un par de esclavos extranjeros muy mal pagados... también sabía que ningún enemigo del pasado terminaría apuñalándola hasta la muerte, y que jeongyeon no la vería mientras se desangraba, y que mucho menos daría sus últimos suspiros mirando los oscuros ojos llorosos de su mujer, recostada sobre su pecho, susurrando sus últimos deseos, sintiendo como la sangre salía por sus múltiples heridas.

im nayeon creía en los finales realistas, y en las vidas realistas. gracias a esto sus dos primeras novelas se habían vendido realmente bien.

las personas adoraban la forma en la que lograba crear historias fascinantes con finales tan comunes que podían ser reales. nayeon sabía que lo hacían porque los lectores estaban tan acostumbrados a finales dramáticos y finales felices que se habían olvidado de los finales verdaderos.

su trabajo como editora también estaba dando buenos frutos.

se podría decir que, con todo su esfuerzo, nayeon cabello estaba triunfando.

estaba entrando al auto luego de un largo día de trabajo cuándo recibió una llamada de su esposa, una hermosa foto de su sonriente y perfecto rostro apareciendo en la pantalla del celular junto a la melodía de una de las canciones de taylor swift.

nayeon: hola amor -dijo con una sonrisa. era extraño como jeongyeon, después de tres años de matrimonio, seguía haciéndola sentir como la chica de diecisiete años que la había visto a través de la ventana.

jeongyeon: amor, se que probablemente estas muy cansada luego de trabajar, pero necesito que vengas al estudio. mi auto se averió.

nayeon: te dije que no compraras esa chatarra, amor.

jeongyeon: era lo único que podíamos pagar luego de comprar este estudio en seúl, remodelar el viejo departamento de jihyo y, bueno... tú sabes qué otra cosa.

la chica de la ventana ; 2yeon ✧Donde viven las historias. Descúbrelo ahora