Capitulo IV "La cabaña"

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Después de que el príncipe Jin literalmente rechazara a la princesa Jisso esta se fue a la habitación que le habían asignado como suya, en ella se encontraba su más fiel escudera, la sargento Ángela, ella estaba sentada en su habitual silla esperando a la princesa, hasta que escucho que abrían la puerta de manera violenta, se puso en guardia y espero a ver quién se adentraba en la misma, cuando vio entrar a la princesa se relajó un poco, pero al verla muy molesta, se acercó a ella.

-que pasa su alteza Jisso? -

-te he dicho que no me llames así cuando estamos solas, odio que lo hagas-

-perdóneme, pero por que esta así? Hace rato la vi salir alegre-

-ese maldito malnacido del príncipe me humillo de la manera más vil que pueda existir, pero me las va a pagar de eso estoy segura, cuando le quite todas las tierras de su reino tendré mi venganza-

-por favor Jisso no debe pensar en eso, desde un principio le hable sobre las actitudes del príncipe y usted decidió no creerme, por favor piénselo, vámonos de aquí, usted no merece eso, por favor Jisso-

- cállate sabes que no 'puedo regresar a menos que él sea mi esposo, mi padre me encerraría de por vida si regreso al reino sin ser la esposa de ese bastardo, y si se enteran que en realidad no me gustan los hombres seria mi ruina total, ellos no deben de saber que tú no eres solo mi guardia-

- por favor Jisso, si no quieres ir al reino huyamos juntas, por favor te lo ruego, muero por decirle al mundo que yo soy la única que te hace feliz-

- ¡YA DIJE QUE NO! No puedes entenderlo, así que por favor deja ese tema en paz, sino ve a dormir afuera, no te necesito aquí-

….

En la habitación del príncipe///

Pensando* esta rosa es hermosa, es la más hermosa que he visto en toda mi vida, como es que alguien que dicen que es un mounstro puede hacer que las rosas puedan crecer de una manera tan mágica, creo que este hombre en realidad no es malo*

Cuando la noche cayo por fin el príncipe se encontraba en su habitación ideando un plan para poder volver a salir.

-si me visto con la capucha negra realmente no me reconocerán y podre volver a donde estaban las rosas-

Así que el príncipe salió por la ventana que daba hacia un pequeño techo, por donde brinco hasta llegar a la primera planta, cuando por fin pudo estar en piso firme, se escondió de inmediato en un muro porque dos guardias hacían ronda, cuando ya no hubo peligro corrió hacia la cerca que pudo brincar con facilidad, cuando pudo salir del palacio escucho a lo lejos a alguien gritar:

- ¡EL PRINCIPE HA ESCAPADO!…¡EL PRINCIPE NO ESTA EN SU HABITACION, BUSQUENLO EN LOS ALREDEDORES!

Cuando Seokjin escucho los gritos, el empezó a correr por el bosque, corrió hasta que se quedó sin aliento, a lo lejos escuchaba como los guardias gritaban su nombre sin éxito alguno, siguió corriendo hasta que encontró una pequeña cabaña en medio de los árboles, a penas visible  por la oscuridad de la noche, sin pensarlo dos veces se adentró en esta para poder refugiarse y que no lo hallaran, cuando por fin pudo entrar, se dio la vuelta para poder cerrar con cuidado de no hacer ruido, cuando alguien le tapó la boca y sintió como sus manos eran llevadas a su espalda, el empezó a temblar de miedo, pues pensó que realmente seria su fin, cuando escucho que la persona hablo con la voz más ronca que había escuchado en la vida.

- ¿quién demonios eres y por qué entras aquí así?

Jin empezó a respirar irregularmente, y empezó a temblar más fuerte, hasta que volvió a escuchar al hombre detrás

-te voy a destapar la boca y si intentas hacer algo, no me importara nada y te matare entendido-

Jin asintió con la cabeza y sintió que poco a poco la fuerza de la mano en su boca iba disminuyendo hasta que estuvo completamente libre de la boca

-pee… per... don, no sabía que esta cabaña estaba habitada, por favor no me haga nada, yo solo quería ocultarme aquí para que no me encuentren-

-dije que quien demonios eres?¡

-me…me... llamo Jin-

-muy bien Jin pues en este lugar no puedes estar, así que es mejor que te largues de una buena vez-
cuando el hombre dijo esto, lo soltó de las manos para llevarlo hacia fuera pero, Jin en un movimiento rápido se volteo, viendo por fin quien era aquel hombre, decir que se había sorprendido era poco porque cuando pudo ver a través de la poca luz que entraba en el lugar vio al hombre completamente vestido de negro y lo único que sobresalía era una hermosa mascara blanca y negra con detalles en dorado que brillaban con la luz de la luna, Jin quedo boquiabierto hasta que el hombre lo jalo del brazo para sacarlo, así el salió de la nube de pensamientos que tenía, hasta que dijo.

-tu… eres el hombre de las rosas-

...

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Holis holis.....

Perdon por no actualizar mucho, a partir de hoy trataré de actualizar al menos una vez por semana, es que se me había ido por completa la inspiración así que no había podido escribir más pero ahora ya ando al 100 jejeje espero y le esté gustado la historia.... Sin más que decir  tomen agüita coman bien jejeje nos vemos pronto besitos

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